Me adentre en un camino extraño no logro distinguir entre lo bueno y lo malo, mis pasos resbalan en algunos trechos del camino y me siento indefensa e inmóvil en algunos otros, es como si me gobernara nadie y no fuese dueña ni de mis pensamientos alguna cosa extraña han de tener sus besos que me hacen traspasar estos senderos maltrechos, solo por quererle solo por volver a verle, pero qué tontería es esta de uno exponerse tanto, como si fuese un hechizo y pasase uno hipnotizado, puedo verme desde afuera como en la pantalla de un cine viéndome caminar tratando de llegar a no sé donde y cuando empezaba a oscurecerse el camino entre las hojas de los arboles se lograron colar algunos rayos de luz iluminando sus pies que son los míos también, y una voz en su interior le dijo debe ser Dios, supongo es su amor del que no puedo huir que no me deja esconder que no me deja mentir, lo cual me hace exponerme y en un mundo como este, es una desventaja enorme ser tan transparente, pero el va acompañarme todo el camino un día lo prometió y el siempre ha cumplido y aunque yo muera de miedo pues no conozco el final.