La energía que se genera en las personas al emprender es muy motivadora y satisfactoria, sin embargo mantener el ímpetu de culminar las metas termina siendo cuesta arriba, por distintas razones, obstáculos, imprevistos, contratiempos, desgano, prejuicios, etc. No obstante, estos impedimentos terminan siendo una constante en las personas que acostumbran a no cerrar ciclos, ni concluir metas en ningún ámbito de su vida. Por otra parte está cuando vemos las metas realizadas y tenemos la sensación de estar en el mismo punto de partida, producto de creer que eso era lo que queríamos, pero en el fondo pocas veces sabemos lo que queremos. Lo importante en la vida es escuchar nuestra intuición y seguirla, no importa cuán loca e irracional parezca. Saludos desde Venezuela, excelente iniciativa de reflexión.
RE: Trabajo, nuestro potencial limitado.