Este es un fragmento de una de mis obras literarias independientes; una de mis favoritas debo agregar, ya que esta estrechamente relacionada con una experiencia personal. espero la disfruten y si les gusto diganmelo en los comentarios, asi me asegurare de subir la novela completa la proxima vez:
(capitulo 9 - Entre la multitud de media tarde)
Quede estupefacto, aturdido, como si un gran martillo hubiese golpeado el gong de mis sentidos; esa seria la única manera de describir lo que sentí al distinguir su figura, su rostro entre la multitud, en medio del ajetreo de media tarde... Fue breve la sensación pues luego me invadió el pánico y el desconcierto, no tuve tiempo de decir nada importante y al verle tomar paso hacia aquellos escalones un acto impulsivo me llevo tras ella, tal vez el anhelo de su escensia o el recuerdo de su afecto. Quise decirle con toda el alma “no te vallas, quédate conmigo”, sin embargo, me contuve y musite una jocosa frase de despedida muy improvisada debo admitir y carente de sentido.
No hubo adiós, al menos no en palabras. Tal vez ninguno quiso despedirse, sin embargo nuestras miradas se cruzaron una ultima vez a través del sucio cristal del balcón antes de retomar (ambos) el rumbo de nuestras vidas…
Odio su vanidad e incredulidad, su forma de llevar la existencia al climax de lo inapropiado, aun así "la quiero" y no puedo negar que en algún momento podría necesitarla otra vez.