Desde siempre, la humanidad ha recibido las enseñanzas de seres elevados que en algunos puntos coinciden y en otros son diferentes. Todos ellos hablan del mundo espiritual, tan real como el material, pudiendo estar en comunicación con ambos gracias a su preparación o porque han recibido algún don especial.
Algunos seguramente los conoces, pero no los más importante de su vida y filosofía. Adéntrate entonces en su fascinante existencia.
Zoroastro
¿Quién fue?: Fue considerado un profeta; es decir, un hombre que hablaba y predicaba la palabra de los dioses, porque había recibido la inspiración divina. En la actualidad este término es aplicado a quienes predicen el futuro, una idea totalmente distinta.
Zoroastro enfrentó a varias tribus que creían en muchos dioses. En cambio, el predicó la existencia de un solo Dios (Ahura Mazda) y de un ser malvado al que llamó Ahriman o Angra Mainyu, por lo que la vida de los hombres transcurre entre el bien y el mal.
Época: Si bien no hay datos exactos sobre el lugar y fecha de su nacimiento, es probable que fuera en Raghes, cerca de Irán, o en Afganistán o Kazajistán alrededor del año 1600 antes de Cristo.
Enseñanzas: Las escribe en un libro que llamó Avesta que dice que el hombre tiene como meta al bien, siendo libre de escoger entre el bien o el mal y que su comportamiento le acarrea consecuencias. Sus creencias forman la religión llamada Mazdeísmo o Zoroastrismo. Su doctrina cambia el antiguo pensamiento de que no era posible escapar de ese destino, pues todo está predeterminado.
Se cree que sus enseñanzas son base del judaísmo y el cristianismo, al señalar una batalla final entre el bien y el mal.
Cómo aplicarlas en tu vida diaria:
Siddhartha Gautama
¿Quién fue?: Es considerado un iluminado. Es decir, alguien que buscó la purificación y la iluminación, renunciando al dolor y al placer. Para ello se sentó bajo una higuera (Arbórea Sagrada) y juró que no se levantaría hasta encontrar la verdad y la liberación. Luego de 49 días lo logró y a partir de ese momento fue conocido como el Buda pues había llegado a la perfecta comprensión de lo que origina el sufrimiento y la forma de eliminarlo.
Época: Nació en Nepal o tal vez en Uttar Pradesh al noroeste de la India. La noche que fue concebido, su madre la reina Maya soñó que un elefante blanco con seis blancos colmillos entraba por su costado derecho y por eso lo llamó Siddhartha que significa “el que logra su propósito”.
Su padre lo encerró en el palacio para que no conociera a los pobres, a los enfermos, a los desvalidos, a los ancianos y al dolor; pero Siddhartha se escapó para visitar su propio reino, donde tuvo “cuatro encuentros”, primero con su propio cochero que le explico que todos envejecemos, después con un enfermo, un anciano, un cadáver en descomposición y un santón. Esto le causó mucha tristeza y decidió vencer esas calamidades a través de una vida de asceta.
Enseñanzas: La verdad de cualquier texto sagrado debe ser comprobada por las propias experiencias y consciencia. Para comprender las cosas, hay que alejarse de las ideas convencionales. Afirmó, además, que no existe un intermediario, un mensajero o un abogado entre los hombres y Dios, sólo hay guías que indican el camino para alcanzar la salvación y la sabiduría, hasta llegar a la liberación absoluta (Nirvana).
Sus cuatro nobles verdades, son: El sufrimiento es parte de la existencia y no es posible vivir sin conocerlo. Su origen proviene del deseo de satisfacer los sentidos. Por eso, hay que desprenderse de ese mundo de ilusión y aniquilar el ego.
Cómo aplicarlas en tu vida diaria:
Jesús de Nazaret
¿Quién fue?: Es la figura más conocida en el mundo e inició la época actual (era cristiana). Fue juzgado y muerto por romper las costumbres judías, tales como hacerse acompañar de mujeres sin estar casado; relacionarse con los más desprotegidos y hasta proscritos de la sociedad, como los leprosos, mientras difundía la “Buena Nueva” acerca de la decisión de Dios de abrir a todos las puertas de la felicidad en la Tierra, la igualdad de todos los seres humanos, su llamado a la paz, la armonía, la solidaridad, la caridad y el entendimiento entre los hombres.
Época: Nació en Belén alrededor del año 0 de nuestra era. Su origen fue humilde, en una comunidad semirrural de una nación conquistada por el imperio romano. Poco se conoce sobre su vida hasta el inicio de su ministerio que duró tres años, para dejar a la humanidad sus enseñanzas, las cuales fueron tachadas de provocativas e insurrectas por los judíos.
Enseñanzas: Dio a conocer a un Dios bondadoso que ama por igual a todos sus hijos (los hombres), y nos ha dado el don del amor universal e incondicional hacia todos nuestros hermanos. De ahí la necesaria renuncia de lo material a favor de mejorar la existencia de todos los seres de la comunidad.
La libertad fue un tema álgido y medular de sus palabras, así como el derecho de todos a la vida, al desarrollo y a la felicidad sin coartación alguna; el dar a cada quien lo suyo; el absoluto divorcio con el mal y el no adorar a nadie pues para eso sólo existe un Dios.
Se autoproclamó como hijo de Dios en el entendimiento de que todos los somos y por ende, es hermano de todo ser humano.
Cómo aplicarlas en tu vida diaria:
Mahoma
¿Quién fue?: Fue seguidor de las doctrinas de Buda y Jesús de Nazaret (a quien Mahoma aceptó como gran profeta e hijo de una virgen), y trato de entender la religión de Abraham pero al darse cuenta de sus diferencias creó una nueva ideología que predicó a partir de sus cuarenta años y que son la base del Islam.
Época: En el año 610 Mahoma se retiró a la cueva del monte Hira para orar, donde recibió del arcángel Gabriel las sentencias que luego escribió en papel, cuero, tallados y huesos de animales dando origen al Corán (que significa “recita”), único libro sagrado del Islam.
Enseñanza: Creyó en la existencia de un solo Dios, quien es el creador de todo el universo y decide todo lo que pasó, pasa y pasará.
La vida es un camino en el que el hombre libremente forja una existencia plena y permanente después de la muerte, siempre y cuando sea caritativo, se entienda con lo demás, perdone, sea fiel, justo y proteja a los más débiles; y condene la usura, la deshonestidad y la falta de fe.
Si bien la vida es un camino de purificación del alma no significa que deba sufrir, al igual que predicó Jesús, ya que puede y debe ser feliz en comunión con los demás.
Contrario a lo que la opinión publica cree, Mahoma y el Islam son promotores de los derechos de la mujer a la que considera igual al hombre, pero también con capacidades y valores únicos.
Cómo aplicarlas en tu vida diaria:
