Nuestros pensamientos tienen un poder inimaginable, a veces el pensamiento nos contradice y en medio de la rutina podemos enfrentar el miedo y la trivialidad de los días que nos amargan.
Vivir mejor implica mirar la vida de forma diferente, de una manera más sensible, más dulce o quizá de forma apasionada, tomarle amor a la vida.
Las armaduras mentales afectan nuestra salud y nuestro cuerpo, algunas veces atacan hasta nuestra humanidad porque al aislarnos no miramos por las otras personas y el fin de nuestra vida social es servir a la felicidad también de los nuestros. Nada es tan cruel cómo vivir únicamente por instinto de conservación, el amor es el que nos salva.
Las personas que se mantienen con miedo u oprimidas terminan enfermando, se aíslan y en muchos casos perjudican a otros porque esos refuerzos negativos se multiplican
Para protegernos y no morir en el intento de lo habitual debemos disolver esas armaduras mentales para renacer en medios de la fortaleza y la armonía.
Debes cambiar paradigmas y enfocarnos a relaciones positivas con el exterior, con los amigos, con la familia y los que amamos. Compartir una vida plena es la clave de borrar lo malo.
Una existencia completa permite el placer de la armonía y apuesta a favor de la plenitud de la vida. De modo que siempre debemos elegir disfrutar y soltar aquellas cosas que nos restan armonía.
Sin duda alguna los más altos sentimientos que van atadas caricias, palabras dulces, música y momentos agradables; todo lo que sube a la alegría.
El mundo está lleno de supuestos, cosas muchas veces sin lógica, pero es la templanza la que nos hace brindar alegría sin egoísmos, y sí ayudamos a los otros también nos ayudamos a nosotros mismos a disolver las armaduras mentales.
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Imágenes propias. Fotografías tomadas con un móvil Blu Vivo One Plus. Cámara f / 2.0 1/100 3.79mm ISO 200. Editadas para los mensajes usando la aplicación de diseños Canva.
