frente a mi te elevas
lentamente
pero no puedo
doy un salto desesperado
y a ti me aferro.
Hice el intento
pero mudo, absorto y de rodillas
como un niño caigo
y sigo sujeto a ti
a nuestro pasado
a un futuro incierto.
E inmóvil me quedo
abrazando al sufrimiento
sin soltar los recuerdos,
la costumbre o el apego
a lo que un dia fuimos,
a lo que una vez vivimos.
Un pasado, un futuro
un silencio y un dolor
que en mi alma
aún hacen nido...