Es curioso como todo surge, cómo la vida se confabula a tu favor, ese día me encontraba con pocos ánimos tanto de salir como de hacer alguna cosa, pero mi compañera, una persona muy activa me convenció para salir a caminar, escogió Pasaguaca, uno de los sectores del Pueblo de Chuao, se trata de un sector en desarrollo con carreteras de tierra, y casa construidas principalmente de Madera o Barro, con una que otras casa de bloques, una comunidad rodeada de vegetación dado a qué colinda directamente con la montaña.

Y es allí donde, podemos encontrar varios hermosos ríos, que te dejan encantados al visitarlos, no puedes ir solo una vez, sientes que será tu lugar favorito y al cual visitaras incontables veces. Siempre he dicho que soy sedentaria, el caminar no es lo mío, pero después de mostrarme un par de fotos, me tuvo convencida de que debí conocer al menos uno de los 7 ríos, el primero de ellos es el Río La Batea, donde se bañan las mayoría de los lugareños y algunos turistas, es un río poco profundo donde se puede pasar un agradable día a la orilla siemplemente hablando o bañándose.

De segundo entontramos el Río del Copei, un rio profundo donde siempre aconsejan que se bañen con precaución, dado que es un río traicionero, más siembargo los locales, utilizan sus alrededores como protagonista de reuniones.

Se acostumbra que después de un sábado de fiestas, o una muy buena pesca, la comunidad realiza un gran sopa de casi cualquier cosa (costilla, mondongo, pecado, pollo) para sus invitados (que es en resumidas cuentas, casi todo el pueblo), después de disfrutar una divina sopa, acompañadas siempre de una cerveza, se pasa a un buen baño en el río Copei, en el que puedes ver a las personas colgarse de un mecate para lanzarse a lo más profundo del Copei.

Caminando un poco más, entramos a Pasaguaca, donde se encuentra el tercer Rio: El Dominga, dicho río es utilizado por su comunidad tanto para tomar baños como para extraer agua, o lavar sus ropas en el. Al llegar me dió la impresión de que se podía entrar en el sin ningún problema, dado a qué muchos niños se encontraban jugando en el, pero más adelante entendimos que las partes profundas del río, tienden a tener una fuerte corriente, y en tiempos de lluvia se hacía imposible entrar.

Atravesamos la comunidad de Pasaguaca, para llegar al cuarto Río, el Perusco, un río tranquilo y semi escondido a la vista de todos, con una aguas cristalinas, de poca profundidad y una corriente tranquila.

Con la emoción de los distintos paisajes y su belleza continuo caminando, ignorando que hasta ese punto, llevábamos aproximadamente unos 3.8km recorridos, el Quinto río que encontramos, es el Dos Ríos, llamado así dado a qué se cruzan el Río Tamaira con el Río del Chorreron, lo peculiar del cruce de estos ríos es la temperatura del agua, aunque el agua del Río Tamaira como el de muchos otros ríos es fría, cuando se pasa al agua del Río del Chorreron se siente tanto frío como el agua que tenemos en nuestra propia nevera, tan fría que se siente ciertas puntadas en la piel. Aunque es un río muy peculiar, posee una importante corriente dónde los ríos se unen, pero aun así no impide que se pueda disfrutar de un baño.

Para el Sexto río, denominado Juan, encontramos un Río con una corriente tranquila y sin mucha profundidad, pero rodeado de bambú lo que otorga cierta privacidad, de los traseuntes, me pareció un río ideal para pasar un tarde del domingo, con un pecado a la parrilla en el fuego.

Por último pero no por eso menos importante, encontré mi río ideal, el Séptimo, llamado Juancito, aunque se tiene cruzar por un camino que puede o no tener alguna serpientes, este se encuentra algo retirado de la comunidad lo que ofrece cierta privacidad, con una profundidad ideal para una baño de cuerpo completo, y una hermosa pared de piedra natural. Encontré su corriente tranquila y pacífica en la cual no puede evitar meterme en cuanto lo ví, me sentí renovada al entrar en sus aguas, supe, que me había enamorado del lugar.

Y así fue como yo, una sedentaria persona y mi compañera Elisa, una facinante persona coincidimos en que los Ríos de Pasaguaca tiene un encanto natural, que al final enamoran a la vista y a tus sentidos. Gracias a este recorrido puede conocer mejor a mi guía turística, la Dra. Elisa García, que aún cuando tenemos poco tiempo de conocernos, me dejó una de las mejores impresiones, y con la que espero compartir muchísimas más caminatas, por Chuao.