Hoy he ido a dar una vuelta con las niñas y hemos ido bordeando el río. Un camino de piedras y arena lleno de naranjos y muchos animales a ambos lados de dicho camino.
Muchos insectos voladores alrededor de los árboles, otros tantos saltamontes, escarabajos... pero ninguna hormiga, lo cual es algo que me ha hecho pensar.
Cuando la clase obrera del mundo animal se toma un día de fiesta... ¿será una señal que nos está mandando la naturaleza? Si hay algo que siempre he dado por hecho es que las hormigas nunca paran, que siempre están en su incansable búsqueda de alimento para llevar a su hormiguero.
Pero ¿qué pasa cuando te cruzas varios de estos hormigueros y no ves a ninguna de sus trabajadoras entrando o saliendo?
Por lo visto esta pandemia está afectando no solo los humanos... ¡HASTA LAS HORMIGAS SE COGEN DÍAS DE FIESTA!