U.Eco narra la búsqueda de una lengua perfecta. ¿Por qué tal propósito está condenado al fracaso?
Umberto Eco en su obra titulada La búsqueda de la lengua perfecta, cuyo contenido es conocer un poco más el panorama del surgimiento y devenir del lenguaje y algunas características que se han convertido en lengua a partir de diversos hechos pasados.
La búsqueda de la lengua perfecta es la historia utópica, de una serie de desaciertos y fracasos; pero por fracasos no quiere decir que la historia resulte fracasada o que se le reste importancia e interés a los acontecimientos por las que ha pasado este sueño y lo que ha hecho que perdure a lo largo de los siglos. El lenguaje es un conjunto de instrumentos no solo para la comunicación e información de verdades, sino mejor, primordialmente para la producción de mutuo entendimiento, acuerdo o tolerancia, de las que el actor humano depende. Siguiendo a Eco “el sueño de lengua perfecta o universal, como respuesta al drama de las divisiones religiosas y políticas”, o al menos como alternativa a la solución de las dificultades en las relaciones económicas.
Y si la historia de este sueño consiste en una sucesión de fracasos, también es cierto que muchas teorías actualmente vigentes son el resultado indirecto de fallidos proyectos de lengua perfecta. Los llamados efectos colaterales, los cuales han dejado una serie de consecuencias beneficiosas en la historia de la civilización.
Pero este propósito está condenado al fracaso, como historia de una utopía, de un sueño imposible, teniendo en cuenta que esta historia nos revela la imposibilidad de huir a la maldición babélica. Se trata de la terca persecución de un sueño irrealizable. “La torre de Babel… es una exhibición de lo inacabado” como lo ha dicho Derrida. Pero como el sueño de una lengua perfecta se rehúsa a morir, es posible que en el futuro la humanidad capte el espíritu de un habla distinta.