¡Hola, gente de internet! Hoy quise participar en esta iniciativa de esta maravillosa comunidad y se trata de hacer una historia perturbadora (ya sea en video o escrita) que trate sobre amor, evidentemente un tipo de amor desacertado o enfermizo, es así como hoy les presento esta historia. Además les dejaré el link a la iniciativa para que se sumen.
Kiyoshi Kun va a la misma escuela que yo, es muy guapo, diría que es el más guapo de la escuela. Su cabello es rubio y reluciente, tiene ojos grandes y expresivos, una complexión bastante atractiva, todas las chicas de la escuela están enamoradas de él y yo no soy la excepción.
Cuando estamos en la escuela, no puedo evitar seguirlo siempre que puedo para verlo reír, estudiar, hacer deportes… siempre he querido hablarle (al menos de asuntos fuera de los de la escuela), pero no he conseguido el valor.
¿Debería simplemente caminar hasta él y hablarle? ¡No! Definitivamente no, era mejor quedarme desde las sombras y mirarlo todo lo que quisiera.
Rayaban las 7 de la tarde, era un caluroso día de verano, las cigarras eran el único sonido que nos acompañaban a Kiyoshi Kun y a mí, él iba unos metros adelante, y yo, con cautela, le seguía. Creía que ya era hora de saber dónde vivía, por ahora, todo lo que sabía de Kiyoshi era su vida en la escuela.
Su casa era bastante bonita y (con el zoom de mi teléfono) pude obtener la clave de su puerta, estaba tan feliz, al fin podría estar más cerca de él.
En un par de horas, Kiyoshi salió y yo como conocía su horario, sabía que iría a sus clases de patinaje artístico, lo que me daba la oportunidad de entrar a su casa. Miré a ambos lados e introduje la clave en la puerta, la cerradura chaqueo y tuve acceso a la casa.
Era bastante bonita, me quité los zapatos en el genkan, mientras caminaba por la casa. Todo me lo recordaba, pero lo que más quería era llegar a su habitación.
Subí al segundo piso y después de ver entre puertas y puertas, por fin llegué a su habitación, era bastante acogedora y se veía la personalidad de Kiyoshi por todas partes.
Me senté en su computadora y revisé sus redes sociales, ahí, en su foto más reciente, estaban los comentarios de todas esas zorras que lo seguían.
Con su cuenta seguí mi perfil falso e hice algunos comentarios de mis fotos, bastante románticos y respondía los que yo previamente le había hecho en sus fotos, eso les enseñaría a esas estúpidas que Kiyoshi estaba ocupado, que no tendría intensiones de coquetear con nadie más que conmigo.
Me acosté en su cama, pude regodearme en su olor y abracé una de sus almohadas para imaginar que era él, cuando más emocionada estaba, oí la puerta principal abrirse.
Algo asustada corrí a esconderme en el armario, creía que tendría más tiempo, pero ahora tendría que adelantar todo mi plan y pensé, odiándome por lo bajo, que dejar mis zapatos en el genkan no había sido buena idea.
Lo escuché moverse por la casa y mientras tanto yo me preparaba, Kiyoshi entró en la habitación, llevaba en las manos un bate, se acercó al armario, en dónde yo estaba escondida, agazapada y todo sucedió en una fracción de segundo.
Kiyoshi abrió la puerta, esperando ver quizá a alguien de pie pero, incluso antes de que pudiera mirar hacia abajo (donde yo me encontraba) ya yo había clavado la jeringa que tenía preparada en su pierna y había inyectado su contenido.
Estaba eufórica mi plan había funcionado, Kiyoshi Kun sería mío.
Él cayó hacia atrás, mareado e intentó enfocar su vista hacia mi.
—Pro… ¿Profesora Nakamura? —musitó.
—Kiyoshi Kun, esta vez por fin podremos ser felices —musité sonriendo ampliamente mientras me acercaba lentamente a él.
Y bueno, gente, esto ha sido todo por el post de hoy, espero que les haya gustado. Muchas gracias como siempre por apoyar mi trabajo, le doy la bienvenida a los nuevos lectores, les quiero mucho a todos, les envío un abrazo y ya nos encontraremos en otro post
Quiero invitar a @ismaelgranados y a @mairene1 a partcicipar
La imagen de despedida la realice en Canva
