[ESP/ENG] Ser un músico en cuarentena | Being a musician in quarantine

¡Saludos, Hive! Si han visto mis posts anteriores se habrán dado cuenta de que soy un gran fanático de los videojuegos y el anime, que son mis principales aficiones en el tiempo libre. Pero, ¿y que estoy haciendo mientras estoy ocupado? Pues hoy hablaré un poco de eso, de mi vida cómo músico, de cómo la cuarentena ha impactado particularmente a este oficio y de cómo los músicos nos encontramos en un momento en el que nos cuesta muchísimo encontrar motivación para seguir haciendo esto.

Así que sin más que decir, ¡comencemos!

No voy a irme mucho a los comienzos de mi carrera musical y trataré de solamente dar un poco de contexto general. Soy músico venezolano, oriundo de Caracas. Comencé en la música a una edad bastante temprana y desde entonces no la he dejado. Elegí mi instrumento, la tuba, a los 13 años (bastante tarde, de hecho) y a los 18 – 19 años se puede decir que comenzó mi carrera profesional. He tocado en la mayoría de las orquestas profesionales de Caracas (como invitado) y he sido tubista fijo de dos orquestas, la Orquesta Filarmónica Nacional y la Orquesta Sinfónica Gran Mariscal de Ayacucho (que es dónde estoy actualmente).

Mi viaje a través de este maravilloso mundo no ha sido precisamente el mejor, ha sido un camino bastante accidentado y creo que alguien sin una terquedad como la mía habría desistido de transitar hace mucho tiempo. Sí, soy una persona sumamente terca y más cuando se trata de mis objetivos; mi objetivo fue ser músico y vivir de la música y no desistí hasta lograrlo. Nunca me consideré ni de cerca el mejor en lo que hacía ni tampoco fui miembro de las mejores orquestas del país, sin embargo, estaba bastante orgulloso de mis logros y de lo que había conseguido a través de mi esfuerzo. Vivía mis días estudiando tuba, viendo clases con mi profesor, y de verdad que a principios del 2020 me sentía en una muy buena racha musicalmente hablando.

Pero… Nadie estaba preparado para una pandemia.

Pasó lo que ya todos sabemos y pues la música se vio particularmente afectada por la sencilla razón de que lo que vende en este medio son los espectáculos en vivo, y no se podían hacer ningún tipo de espectáculos en vivo. La orquesta donde toco reaccionó rápido a esto y creo que fue una de las primeras orquestas Venezuela en hacer “presentaciones virtuales”, estas consistían de grabarnos tocando desde nuestras casas y unir todas las tomas para hacer los famosos videos de “cuadritos”. Si bien esto era una iniciativa genial, yo no me sentía para nada bien…

Además de la orquesta sinfónica, también soy miembro del Ensamble Multiverso, una banda de rock sinfónico en la que todos somos amigos, tenemos gustos muy parecidos, y venimos casi del mismo lugar de formación musical. El Ensamble también comenzó a hacer grabaciones, pero como somos muchos menos integrantes que una orquesta y además, vivimos relativamente cerca, podíamos hacer estas grabaciones de manera presencial, cosa que me motivó muchísimo. Mis amigos y mi novia han sido una parte fundamental durante este proceso de readaptación, ellos me han escuchado, me han aconsejado, me han motivado, y también me han regañado. Se puede decir que gracias a ellos no he perdido completamente la chispa de seguir siendo músico.

La Digital Chamber Orchestra fue un proyecto que surgió a raíz de una idea de mi buen amigo Efraín Martínez, la premisa de esta orquesta era sencilla: una orquesta digital que ejecutara repertorio académico de buen nivel a través de plataformas digitales.

^{Banner hecho para la DCO el día internacional del músico, que se celebra el 22 de noviembre.}

Con estas dos agrupaciones grabé un montón de cosas, siendo las que más importancia tuvieron para mí: El sólo de tuba de Bydlo de Cuadros de una Exposición de Modest Mussorgsky, un cover para cuatro metales de Bohemian Rhapsody de Queen, y un cover de solo tuba de Love of my Life, también de Queen.

Sin embargo la situación no deja de ser difícil, la pandemia está lejos de terminar en Venezuela, para el momento que escribo este post tengo aproximadamente un mes sin tocar tuba porque he estado ocupado tratando de enfocarme en otras cosas. Me dolería dejar la música y lamentablemente me atrevo a decir que una buena parte de los músicos nos encontramos en una situación similar. Pero a pesar de todo esto, trato de sobrellevar la situación un día a la vez, no forzarme a tocar tuba cuándo no quiero hacerlo, aprovechar el tiempo para descubrir habilidades que no sabía que tenía, etc.
No sé qué pasará el día de mañana ni mucho menos que decisión tomaré, sin embargo no me queda más que tomar todo lo positivo de esta experiencia y seguir adelante. Espero honestamente que mi mente se aclare y pueda reencontrarme con mi amado instrumento en un futuro no tan lejano.

^{Aún grabando conciertos desde casa}

Greetings, Hive! If you had read any of my prior posts, you’ll have noticed that I’m a big fan of videogames and anime, they are my primary hobbies in my free time. But, what about my “busy time”? Today I’m gonna talk a little bit about that, about my life as a musician, about how quarantine had impacted this work, and also about how me and many musicians out there are having a rough time trying to find motivation to keep going on with this career.

So without any further ado, let’s start!

I wouldn’t go deep about my musical career beginnings and I would just give some general context. I’m a Venezuelan musician, born and raised in Caracas. I started studying music at a very young age and I stuck with it since then. I choose my instrument, the tuba, when I was 13 (pretty late btw) and when I was around 18 – 19 years old we can say that my professional career started. I have played in most of Caracas’s professional orchestras (as a guest) and been permanently working in two of them, Philharmonic National Orchestra and Ayacucho’s Great Marical Symphonic Orchestra (which is my current job).

My journey through this fantastic world hasn’t been precisely a ride in the park, in fact, it has been a quite rough journey and I think that someone that isn’t as stubborn as me would’ve quit long time ago. Yes, I’m a very stubborn person and especially when it’s about my goals; my goal was to be a musician and to live out of music and I never stopped until I made it true. By any means I consider myself as the best and neither had been a member of the country best orchestras, however, I was pretty proud about my achievements and what I had gotten through my effort. I was just living the day playing tuba, going to classes with my instrument professor, and for real, at the beginning of 2020 I was feeling very good musically speaking.

But… No one was prepared for a pandemic.

It happened what we already know, and the music was heavily affected by this, the reason is simple, what sells in this media are live shows, and live shows weren’t allowed to be done. Despite that, the orchestra where I work (Ayacucho’s Great Mariscal Orchestra) had a quick reaction to this, and I think that it was one of the first orchestras in Venezuela on doing these “virtual shows”, these shows consists about recording ourselves from home, send the recordings, and put together all the shots in a same video. Though it was a nice initiative, I didn’t felt any good at all…

Apart from the symphonic orchestra, I’m also a member of a symphonic rock band called Ensamble Multiverso, in this band we’re all close friends, and almost every one of us comes from the same academic music education institute. Multiverso began to do some recordings too, we have the advantage of not having too many members (compared to an orchestra) and also that all members live relatively close, meanings this that we could do those recordings in person, and this motivated me a lot. My friends and my girlfriend had been a fundamental role in this re-adaptation process, they had listened to me, gave me advice, motivated me, scolded me, etc. It’s ok to say that thanks to them I haven’t completely lost the ember to keep on music.

The Digital Chamber Orchestra is a project that came from the idea of a good friend of mine, Efrain Martinez. This orchestra’s premise was simple: a digital orchestra that could play high-level academic repertory and distributed it on digital platforms.

^{Banner made for the DCO to conmemorate international musicians day, which takes place on November 22.}

I have recorded a lot of things alongside these two groups, being the ones more significant to me: the Tuba solo from Bydlo, from Pictures at an Exhibition from Modest Mussorgsky, a cover for a brass quartet from Bohemian Rhapsody – Queen, an a cover from Love of my Life, also Queen, for tuba solo.

However the situation keeps rough, pandemic is far from over in Venezuela, by the time I’m writing this I have around one month without playing the tuba, mainly because I’ve been busy trying to focus on other things. It would be painful if I quit on being a musician; unfortunately, I would dear to say that there's a good bunch of musicians out there in a situation similar as mine. Whereas, I try to keep going on one day at a time, not forcing myself to play the tuba when I don’t want to, use my time to improve on previous skills or discover new ones, etc.

I don’t know what’s gonna happen tomorrow or even what choice I would make in the future, but there isn’t too much I could do besides taking the best from this experience and keep moving forward. Honestly, I hope my mind to eventually became clear and that I can be able to meet myself again with my loved instrument in a not so far future.

^{Still recording from home}

Y esto es todo por hoy. ¿Y tú? ¿También eres músico? ¿Cómo sientes que ha cambiado tu profesión la pandemia? ¿Cómo sientes que ha cambiado tu vida en general en la pandemia?

That’s a wrap for today. What about you? Are you a musician too? How do you feel your career had changed in the pandemic? How do you feel your life in a general way had changed?