Una vez más como siempre escribo, estoy aquí participando del concurso Observa, Piensa y Escribe de TopFiveFamily, basado en la imagen que acompaña este post, la cual es propiedad de @lanzjoseg. Aquí les dejo el vínculo al concurso para los que se animen a participar, afirmo que este concurso es una excelente oportunidad de desarrollar tu creatividad, si estás dispuesto a asumir el reto, visita la convocatoria y participa siguiendo el enlace anterior. Gracias a @topfivefamily por mantener esta iniciativa y hacerlo con atractivas propuestas en cada ronda, igualmente gracias a @lanzjoseg.
'''֍֎֎[Historia Real]֍֎֎'''
Hoy les traigo uno de esos relatos personales de mi juventud. A casi todos los hombres nos gustan las motos y yo no soy la excepción. Hace unos años, tuve una Suzuki AX100, pero en sus inicios fue un Karpaty, jeje. Resulta que acá en Cuba, hace algunos años comenzaron a autorizar la remotorización de las Motos, así que todo el que tenía una motico como se le llama en algunas regiones de Cuba a las motocicletas de 50CC, y podía mejorarla, remotorizandola, lo hizo, así fue como mi Karpaty paso a ser un Suzuki.
La única caída que he tenido en una moto, fue en ese Karpaty y creo que nunca lo voy a olvidar. Yo venía de regreso a mi casa, de un pueblito de campo llamado Feitas. Había ido hasta allí por un camino, pésimamente malo e intransitable, llamado el camino de Antombran, así que para regresar decidí ir por el camino de Meriño - Caisimú. Ambos eran terraplenes, pero este último estaba plano como una carretera de asfalto. Así que me dio por correr. Aquella motico en menos de 100 metros montaba 80 km y más, así que a correr se ha dicho.
Pero al llegar al poblado de Meriño, no me percaté que debía desviarme en una intención rumbo al Cerro de Caisimú y al intentar desviarme bruscamente, rodé unos cuatro metros, sin soltarme del Karpaty. Lo peor era que había una fiesta en aquel pueblito y todo el que estaba allí me vio rodar. Jaja, pero yo ni lento ni perezoso, me incorporé, le puse la manguera de la gasolina que se había zafado con la caída. Al instante le di dos patadas a la pata de arranque y aun con la manilla del embrague partida al medio, salí disparado a la misma velocidad que venía.
Unos 3 km más adelante paré en un río a lavarme las heridas que me duraron casi cuatro meses en sanar. Gracias a esa caída cundo remotoricé al AX100 nunca corrí la Moto al tope jeje. Tengo un sin fin de historias, pero no los voy a atormentar con ellas. Solo un consejo, cuídese y use todas las medidas de seguridad posible si va a montar en motos.
A los que llegaron hasta el final, gracias por leer.
Una vez más al creador de esta iniciativa y a sus colaboradores, gracias por darme la oportunidad de participar.
Por último, a todos los participantes éxitos 🙌.
-Contenido original, escrito por mí para este concurso.
-Imagen de @lanzjoseg compartida para este concurso.