Victoria, era una niña dulce, risueña, con un corazón noble, vivía en un lugar alejado de la ciudad, como todos los niños amaba la navidad, contaba los días para que su noche favorita del año llegará. Esa noche de ensueño, en que su familia se reunía en casa de su abuela, quien siempre la esperaba con una taza enorme de chocolate con leche y esas galletas caseras que olían a gloria.
Año tras año, Victoria acompañaba a su padre a elegir el más grande y verde de los árboles de navidad, ansiaba escoger los adornos navideños y por supuesto ser ella quien colocara la estrella de navidad. Mientras su abuela, preparaba la cena más deliciosa del año, la cena de navidad.
Toda su familia, se deleitaba de la inocencia y carisma de Victoria, no había nadie con más espíritu navideño que ella. Nadie cuidaba el arbolito tanto como ella, especialmente los regalos.
Los años fueron pasando y Victoria disfrutaba año tras año de todas las tradiciones navideñas de su familia, pero a medida que crecía su espíritu navideño se iba desvaneciendo, ya no le importaba ir con su padre en busca del arbolito, mucho menos, ir por esa taza de chocolate caliente, que muchas veces se enfrió sobre la mesa. Algo, había apagado esa llama o simplemente ella comenzó a darlo todo por sentado.
Pasaron varias navidades, en que su abuela y su padre, quienes era los seres más cercanos a ella y quienes la amaban con todo su ser, veían con dolor lo que estaba pasando y se preguntaban porque ella se había vuelto un ser indiferente, especialmente con ellos, no entendían, que había pasado, se sentían tristes y cansados, pues era esa jovencita quien les inyectaba energía, su motivación para vivir, para ellos siempre serían la niña de la casa.
Una noche antes del día del inicio de la navidad, Victoria sostuvo una dura discusión con su familia, sentía que ellos la hacían sentir abrumada y que la vida sin ellos sería incluso mejor, ellos quedaron destruidos con sus duras palabras y decidieron que este año no celebrarían la navidad.
Victoria se fue a la cama sonriendo, creyendo que había logrado su cometido, al despertar, salto de ella como siempre, se dirigió a la cocina en busca de su desayuno, pero no encontró nada sobre la mesa, como era costumbre, se dirigió a la cochera, pero se percató que no había ningún carro en ella, no le dio importancia tenía suficiente dinero, para pasar el día por su cuenta, pero esta también había quedado vacía. Ese día por la noche, todo el vecindario encendería las luces de navidad, menos su casa, pues quedaría bajo una sombría oscuridad.
Esa noche, Victoria descubrió el verdadero sentido de la navidad, extraño a su familia y se dio cuenta de lo dichosa que fue su infancia, quería revivir todo de nuevo, pero su familia, ya no estaba y nada material podría reemplazarlos, sintió temor de que ellos jamás la perdonaran y de que jamás volviera a sentir ese sentimiento de alegría, de paz y de felicidad que transmite la navidad.
Entonces, comprendió que la familia es el tesoro más valioso y es lo que realmente le da sentido a la navidad, se dio cuenta de que no estarán para siempre con nosotros, por eso debemos valorarla y cuidarla, día tras día. Su prioridad ahora sería recuperar la familia y salvar la navidad, los busco por todos lados, pero no los encontró, volvió a casa arrepentida por todos sus errores, pensando que ya era demasiado tarde y para su sorpresa encontró las luces encendidas y el arbolito lleno de hermosas decoraciones, junto a su familia, quienes las esperaban en casa, como si nada hubiese pasado, pues el amor de familia, es tan grande, que puede sobrepasar el orgullo y las heridas.
Victoria les dio el mayor de los abrazos, coloco la estrella en el arbolito y desde ese día mantuvo su espíritu navideño, todos los días del año, llenando de amor y vitalidad a su pequeña pero valiosa familia.
Esta es mi entrada al concurso #topfamily. Ha sido un placer participar de nuevo, aprovecho para invitaros al concurso dejaré el enlace más abajo:
English Version.
Victoria, was a sweet, smiling girl, with a noble heart, she lived in a place far from the city, like all children she loved Christmas, she counted the days until her favorite night of the year would come. That dreamy night, when her family would gather at her grandmother's house, who was always waiting for her with a huge cup of chocolate milk and those homemade cookies that smelled like glory.
Year after year, Victoria would accompany her father to choose the biggest and greenest Christmas tree, she looked forward to picking out the Christmas ornaments and of course to be the one to put up the Christmas star. While her grandmother prepared the most delicious dinner of the year, Christmas dinner.
Her whole family delighted in Victoria's innocence and charisma, there was no one with more Christmas spirit than her. No one cared for the tree as much as she did, especially the gifts.
The years went by and Victoria enjoyed year after year all the Christmas traditions of her family, but as she grew older her Christmas spirit was fading, she no longer cared to go with her father in search of the tree, much less, to go for that cup of hot chocolate, which often got cold on the table. Something had extinguished that flame or she simply began to take it all for granted.
Several Christmases passed, in which her grandmother and her father, who were the closest people to her and who loved her with all their being, saw with pain what was happening and wondered why she had become indifferent, especially with them, they did not understand what had happened, they felt sad and tired, because it was that young girl who injected them with energy, their motivation to live, for them they would always be the girl of the house.
One night before Christmas Eve, Victoria had a hard discussion with her family, she felt that they made her feel overwhelmed and that life without them would be even better, they were destroyed by her harsh words and decided that this year they would not celebrate Christmas.
Victoria went to bed smiling, believing that she had achieved her goal, when she woke up, she jumped out of bed as usual, she went to the kitchen in search of her breakfast, but found nothing on the table, as usual, she went to the garage, but noticed that there was no car in it, she did not give it importance, she had enough money to spend the day on her own, but it was also empty. That day at night, the whole neighborhood would turn on the Christmas lights, except her house, because it would be under a gloomy darkness.
That night, Victoria discovered the true meaning of Christmas, she missed her family and realized how happy her childhood had been, she wanted to relive everything again, but her family was gone and nothing material could replace them, she was afraid that they would never forgive her and that she would never again feel that feeling of joy, peace and happiness that Christmas transmits.
Then, she understood that family is the most valuable treasure and is what really gives meaning to Christmas, she realized that they will not be with us forever, that is why we must value and take care of them, day after day. Her priority now would be to recover the family and save Christmas, she looked for them everywhere, but did not find them, she returned home regretting all her mistakes, thinking it was too late and to her surprise she found the lights on and the tree full of beautiful decorations, with her family, who were waiting for them at home, as if nothing had happened, because the love of family is so great that it can overcome pride and wounds.
Victoria gave them the biggest hug, placed the star on the tree and from that day on she kept her Christmas spirit every day of the year, filling her small but valuable family with love and vitality.
This is my entry to the #topfamily contest. It has been a pleasure to participate again, I take this opportunity to invite you to the contest I will leave the link below:
Imagen de @lanzjoseg, banner y separador creado en canva, traducción realizada en DeepL.
