Las personas difieren según sus antecedentes, algunos no podían pagar una tarifa para estudiar y, como resultado, no pueden hablar el idioma de la reina con fluidez. Esto es lo que Fred Meyer no entendió, esperaba que todos hablaran inglés con la misma fluidez que él. . Fred Meyer era gerente de una gran empresa, era vasto y dominaba bien el inglés. No podía esperar para llover insultos sobre sus trabajadores que él sentía que no eran competentes y difícilmente asociados con personas que él sentía que no estaban en su nivel de comprensión. Sus trabajadores le temían, por mucho que trataran de complacerlo, su esfuerzo no era suficiente. Tenía una novia que era de un hogar rico pero disciplinada para entender la crianza y las diferencias individuales.
Un anciano que trabajaba en la empresa de Fred notó su actitud y se enojó por su comportamiento. Fred solo lo insultó más cuando trató de aconsejarlo en contra de su ideología sobre las personas. El anciano se sintió insultado y le echó una maldición, esto se convirtió en la pesadilla de Meyer.
Una fatídica mañana, Fred se despertó y se dio cuenta de que su fluidez en inglés se había alterado. Hablaba como un hombre común, cometiendo errores con cada declaración que hacía. Lo último que podía recordar era su conversación con el anciano que lo había maldecido. Avergonzado de en quién se había convertido, fue en busca del anciano para quitarle esta maldición, pero se dio cuenta de que había dejado la empresa, Fred se sintió condenado si alguna vez iba a vivir hablando como los hombres locales a los que siempre había insultado. Se tomó un descanso del trabajo para ir en busca del anciano.
Durante 7 días, Fred vagó de las calles a las trincheras, pero no pudo encontrar al anciano. Preguntó a los transeúntes, describiendo cómo se veía el anciano pero nadie lo reconoció. Después de una búsqueda infructuosa, Fred decidió aceptar su destino. Avergonzado, regresó a su oficina, pero esta vez con humildad. Apenas hablaba y no podía hacer reuniones porque había sido víctima de la misma circunstancia por la que había regañado a la gente. A pesar de su desgracia, la gente todavía lo amaba igual. Poco a poco, comenzó a darse cuenta de que la vida no se trata solo de la perfección, sino de la aceptación de las personas en sus propias debilidades y fortalezas.
Había comenzado a comprender que la vida no era toda la filosofía que tenía en la cabeza y había aceptado vivir su vida con el error que había cometido cuando de repente se le quitó la maldición. Una vez más, podía hablar con tanta fluidez como antes, pero esta vez tuvo cuidado de no juzgar ni subestimar a nadie porque era un privilegiado. Este incidente cambió la vida de Fred Meyer para siempre.
People differ based on their background, some couldn't afford a fee to study and as a result can not speak the queen's language fluently, This is what Fred Meyer didn't understand, he expected everyone to be as fluent in English as he was. Fred Meyer was a manager of a big company, he was vast and good in command of English. He couldn't wait to rain insults on his workers who he felt weren't competent and hardly associated with people who he felt weren't in his level of understanding. His workers feared him, as much as they tried to please him, their effort wasn't enough. He had a girlfriend who was from a wealthy home but disciplined to understand individual upbringing and differences.
An old man working in Fred's company noticed his attitude and was angered by his behavior. Fred only insulted him the more as he tried to advise him against his ideology about people. The old man felt insulted and laid a curse on him, this became Meyer's nightmare.
One fateful morning, Fred woke up and realized his fluency in English had been altered. He spoke like a common man, making blunders with every statement he made. The last thing he could remember was his conversation with the old man who had cursed him. Ashamed of who he had become he went in search of the old man to take away this curse from him but realized he had left the company, Fred felt doomed if he was ever going to live speaking like the local men he had always insulted. He took some break off work to go in search of the old man.
For 7 days Fred wandered from streets to trenches, but couldn't find the old man. He asked passers-by, describing how the old man looked but no one recognized him. After a fruitless search, Fred decided to accept his fate. In shame he returned to his office, but this time he was humbled. He hardly spoke and could not hold meetings because he had become a victim of the same circumstance he had scolded people for. Despite his misfortune, people still loved him the same. Gradually, he started to realize that life is not all about perfection but the acceptance of people in their own weakness and strength.
He had started to understand that life wasn't all the philosophy he had in his head and had accepted to live his life with the mistake he had made when suddenly the curse was lifted off him. Once again, he could speak as fluently as he spoke before, but this time, he was careful not to judge and underrate anyone because he was privileged. This incident changed the life of Fred Meyer forever.