Bueno espero que no hayas mal interpretado mi comentario, no estoy diciendo que esté mal el relato que has escrito, por el contrario, al menos a mi logró engañarme, yo esperaba algo y resulto de una forma muy diferente, eso es un gran logro para cualquier historia, pues no es predecible. Pero, en lo que centre mi comentario anterior fue básicamente sobre el género en que se enmarca la historia, ya que a mi parecer carece del componente científico propio de la ciencia ficción, lo cual se me hace en cierto modo novedoso, ya que comienza con un estilo muy propio de la ciencia ficción y luego toma un rumbo diferente, no sé si exista un género para eso, de allí mi comentario.
Sin embargo, tampoco me atrevería a asegurar tajantemente que tu relato no encaje con el concepto de ciencia ficción, ya que, desde mi punto de vista, la presencia de avances tecnológicos no es una condición sine qua non para que una historia pueda ser considerada como una obra de ciencia ficción. Siempre que la historia presente mundos o sociedades con características diferentes a las que conocemos en el mundo real hasta la fecha presente, se considera ciencia ficción. Pero ojo, esas características alternativas, no deben corresponder únicamente al ámbito de la fantasía, sino que es necesario que presenten un mínimo de coherencia científica.
Por ejemplo, Harry Potter es literatura de genero de la fantasía, ya que la magia no es algo científico, en cambio Los Juegos del Hambre, es ciencia ficción, pues más allá del nivel tecnológico que pueda mostrar esa historia, la sociedad que describe corresponde a una distopia, es decir un mundo con condiciones diferentes a las del mundo real y que pudieran llegar a ocurrir en el mundo real. Realmente la línea divisoria entre géneros es muy delgada y difusa.