Extraño concurso no 12. FRÍO en Mérida

Eleonora Gómez, natural de República Dominicana, es una chef que trabaja en un famoso Resort de su país. Ya era octubre y le correspondían sus vacaciones. Decide ir a México, siempre quiso conocer la cultura azteca. Adicionalmente, aprovecharía para indagar sobre los platillos con chiles y moles. A esos les daría su sello personal y los agregaría, a su nuevo menú, cuando se incorporase nuevamente al trabajo.

Partió un fin de semana a Ciudad de México. Allí tenía planeadas las visitas al lago Xochimilco, las pirámides y la Plaza Garibaldi. En este último lugar, escuchando a los mariachis, conoce a la familia Tinedo, oriunda de Venezuela. Entablan una bonita amistad. Con ellos compartiría el resto de su viaje. Al despedirse los Tinedo la invitan a conocer su país.

Pasaron los meses y siguió comunicándose con sus nuevos amigos. Aunque a Eleonora no le gustaba el frío, se emociona, y decide aceptar la invitación. Los Tinedo viven en Mérida. Son muy conocidos por sus vecinos, son excelentes anfitriones.

Al llegar la recogieron en el aeropuerto. Eleonora estaba un poco asustada. Tuvo una sensación, fría, extraña, al estar en el aeropuerto.

-Bienvenida a nuestra tierra- le dice la Señora Tinedo.

-Gracias – contesta Eleonora.

Maite, la hija, al ver la cara de su amiga le suministra una chaqueta. Ella no estaba acostumbrada a ese clima. Ese día estaba lloviendo fuerte. Decidieron que se quedarían en la casa de la tía Julia. Era una antigua casona que estaba en el centro de la ciudad.

Esa noche le asignaron el cuarto de huéspedes. Eleonora no se podía dormir y revisó sus nuevas recetas. Intuía que no debía quedarse dormida.

Escucha un susurro, mira el reloj. De nuevo ese susurro ……apareció por el pasillo ……. …..Martaaaaaaa. Siente un frío intenso…...Sale de la habitación…. Con miedo…..... sigue la voz del susurro llega a otra habitación. La manija de la puerta giró sola. Eleonora decide entrar….. se enciende la luz de una vela. Un frío intenso le recorre su cuerpo y le llega hasta los huesos. Nunca había sentido eso.

¿Que era aquello?, ¿por qué estaban allí? Decidió observar, con más detalle, los cuadros terroríficos donde mostraban sacrificios humanos. ¡Pum! Un cuaderno lleno de polvo cae al suelo. Eleonora lo abre. Era el diario de Matilda, la bisabuela de la familia Tinedo, muerta en extrañas circunstancias.