Si llego al amanecer
después del aguacero
¿abrirás la puerta
o dejarás que me
cosuma el silencio?
Vengo de los parajes
desiertos,
de caminos tortuosos
vengo con el dolor de los
días a cuestas
Con el llanto de las madrugadas
Si llego a casa
¿en realidad estoy
en casa?
¿O seré un extraño
en este sitio que alguna
vez llamé hogar?
Quiero quedarme
forjar la tierra con mis manos
y acariciarte ante el dolor
pero no sé si estaré
en el lugar correcto
si me reconocerás
con todas las heridas a cuestas
con mis manos reventadas
y mi piel ceniza
Si me acuesto en mi lecho
¿permaneceré para siempre?
Podré morir tranquilo?
¿O mi cuerpo será abandonado
en la marea del tiempo?
Si regreso, ¿me reconocerás?
¿Sabrás distinguir cada facción de
mi rostro?
El regreso no es lo imaginado
los escombros habitan la casa
y la memoria es solo polvo
Tus ojos reflejan las tormentas
que transcurrieron
y las que se avecinan
y me miran
como si yo nunca hubiese existido.