¡Wow, Mari! Me has dejado sin palabras. Demasiado preciosas estas fotografías. Desde el trabajo de escenografía, vestuario, la acompañante (tú lorita) y ese maquillaje, te has lucido. Transmiten mucha tranquilidad, frescura, ternura. Pareces la madre tierra. Te envío un fuerte abrazo, me a encantado.