Llegó octubre, y con él el inicio a clases. Una época esperada por muchos niños y por la gran mayoría de los padres, quienes ven las puertas del cielo abrirse, y en casa no es la excepción, más por los niños que por mí, pues quieren reencontrarse con sus compañeros de clases y disfrutar de esa etapa bonita a la que todos quisieramos volver.
En mi caso, el inicio a clases implica mucha preocupación, especialmente por la salud de Miranda, quien aparentemente tiene un imán súper potente para atraer cuanta gripe le pase por el frente, y la mayoría de los casos, esa gripe que para muchos se va en dos o tres días, en el caso de ella termina en crisis asmáticas, así que la verdad no soy muy fan de las idas al colegio, además los extraño un mundo, pero obvio tienen que ir, y por supuesto nos preparamos.
Compramos útiles escolares, uniformes y todo lo necesario para el inicio del año escolar e incluso Miranda estaba tan entusiasmada que decidió este año realizar por su cuenta las portadas de sus cuadernos que quedaron realmente lindas.
Y finalmente llegó el lunes y fueron súper felices al primer día de clases y regresaron más felices aún, cargados de muchas historias y cuentos divertidos del primer día, pero la felicidad no duró mucho, por lo menos no para Miranda y para todos en casa, pues el miércoles regresó del colegio con una "alergia" bastante fuerte que se extendió durante todo el día a pesar de los medicamentos, y para el jueves amaneció con congestión nasal, y por supuesto no fue al colegio.
El viernes inició la tos, y a solo 20 minutos comenzamos con la crisis de asma. La verdad no podía creer que no había transcurrido ni una semana para que la niña se enfermara y convertir en una verdadera pesadilla el inicio de año escolar.
Ese día estuvo 5 horas internada en el ambulatorio recibiendo tratamiento endovenoso, y regresamos a casa con nebulizaciones por 5 días y un tratamiento prolongado para mejorar su función pulmonar, así que como ven, bastante atropellado todo y se repite la historia del año pasado donde sí buscan en mi blog, se encontrarán con un post muy similar.
Por lo pronto sigue con tos y nebulizaciones, haciendo las tareas en casa y rogando a Dios que este no sea un indicativo de cómo será este año escolar para ella, y por supuesto para nosotros como familia, pues nos pone a temblar a todos, incluido su hermano.
Así que esperamos que para el fin de semana esté completamente bien y pueda incorporarse a sus clases de manera regular el día lunes y que la gripe se mantenga alejada de ella para que pueda disfrutar del regreso a clases como lo soñó y lo merece.
October has arrived, and with it the beginning of school. A time awaited by many children and by the vast majority of parents, who see the gates of heaven open, and at home is no exception, more for the children than for me, because they want to meet again with their classmates and enjoy that beautiful stage to which we all would like to return.
In my case, the beginning of school involves a lot of concern, especially for Miranda's health, who apparently has a super powerful magnet to attract any flu that passes in front of her, and in most cases, that flu that for many people goes away in two or three days, in her case ends in asthmatic crisis, so the truth is that I am not a big fan of going to school, besides I miss them a lot, but obviously they have to go, and of course we prepare ourselves.
We bought school supplies, uniforms and everything needed for the beginning of the school year and even Miranda was so excited that this year she decided to make the covers of her notebooks on her own and they turned out really nice.
And finally Monday came and they were super happy to the first day of school and came back even happier, loaded with many stories and funny tales of the first day, but happiness did not last long, at least not for Miranda and for everyone at home, because on Wednesday she came back from school with a "allergy " quite strong that extended throughout the day despite the medications, and by Thursday she woke up with nasal congestion, and of course she did not go to school.
On Friday the cough started, and after only 20 minutes we started the asthma attack. I really couldn't believe that not even a week had passed for the child to get sick and turn the beginning of the school year into a real nightmare.
That day she was hospitalized for 5 hours in the outpatient clinic receiving intravenous treatment, and we returned home with nebulizations for 5 days and a prolonged treatment to improve her lung function, so as you can see, everything is quite rushed and repeats the story of last year where if you look in my blog, you will find a very similar post.
For now she is still coughing and nebulizing, doing her homework at home and praying to God that this is not an indication of how this school year will be for her, and of course for us as a family, because it makes us all tremble, including her brother.
So we hope that by the weekend she will be completely fine and will be able to join her classes regularly on Monday and that the flu stays away from her so she can enjoy back to school as she dreamed and deserves.