Hola, amigos y madres hermosas de #Motherhood. Espero estén teniendo un bonito fin de semana.
Hoy quiero sumarme a esta iniciativa y contarles un poco sobre mi trayectoria como madre desde el inicio.
Esta iniciativa me llama mucho la atención, ya que como madre puedo plasmar lo que siento y de un modo u otro desahogarme.
En el 2019 junto con mi actual pareja nos enteramos que seríamos padres de nuestra primera bebé. En ese momento no estábamos preparados del todo, ni siquiera nos imaginamos ser padres en tan poco tiempo juntos. Para mí, fue algo difícil aceptar esa noticia, pero luego de unos días empecé a imaginar cómo sería mi vida junto a mi pareja y mi bebé.
Mi primer embarazo fue algo bonito, ya que nos encontrábamos en Colombia, Bogotá. Mi pareja tenía un trabajo estable y vivíamos en tranquilidad. A partir de las 4 semanas de embarazo me puse en control, ya que siendo de Venezuela me correspondía dar toda la documentación para dar a luz allá.
Nunca imaginé perder mi bebé. Ella nació y desde ese momento empezó mi trayectoria. Con un mes y seis días la perdí. Puedo decir que esa maternidad no duró, fue como el polvo que cayó y luego se dispersó. No experimenté muchas cosas, sólo miedo y tristeza. Fueron muy pocos los momentos que puse disfrutar de mi bebé.
Desde ese entonces sentí que arrancaron una parte de mi corazón. Siempre me pregunté si en algún momento pude haber hecho algo que cambiará el resultado, pero ya sabía la respuesta. Mi hija no estaba hecha para este mundo y me costó muchísimo sobrellevar este dolor.
En inicios de este año, el 21 de enero nació Emma, mi segunda bebé. En el momento en que supe que estaba embarazada de ella me asusté, pero estaba preparada para volver a ser mamá. Y mi pareja estaba muy contento. Empezamos a planear e imaginar cómo sería el nacimiento de nuestra niña, aunque por otro lado sentíamos temor por los antecedentes que teníamos con nuestra anterior bebé.
He tenido momentos que en cierto aspecto me han costado. He aprendido mucho y aún sigo en el proceso de aprendizaje. Mi hija me ha enseñado sobre muchas emociones que no había tenido antes, o que sí había tenido pero no supe reconocer. Me siento llena de alegría cuando miro a mi nené todas las mañanas despertarse con una carita llena de alegría y sonreírme al ver que estoy a su lado. Los gestos que hace cuando la tomo en mis brazos para luego alimentarla dándole pecho.
Todo salió muy bien, me mudé a casa de mi mamá, ya que ella me regaló un terreno donde mi pareja y yo pensamos construir nuestro hogar, y además, me volví más unida a mi pareja.
No puedo decir que me encuentro muy bien, aunque tengo a mi hija y ella llena cada día mis baterías, y recarga mi corazón, hay algo que nos falta, y digo nos falta, refiriéndome a mi bebé y a mí. Mi esposo se fue a Colombia para poder darnos estabilidad económica y la verdad es que nos hace mucha falta, en especial a mí.
Desde que mi bebé llegó a nuestras vidas he tenido un gran avance en mis emociones, para bien. Pero la soledad es algo qué me ha dado fuerte. Con mi pareja teníamos la costumbre de que al final de cada día conversabamos sobre cómo nos fue o cómo nos sentíamos. Yo podía desahogarme, e igual él, y terminábamos abrazados mientras me decía lo bien que estaba cuidando de Emma. Orabamos antes de dormir junto a nuestra bebé. Era algo que nos unía cada vez más.
Yo soy una persona de tener muy pocos amigos, me cuesta mucho confiar y debido a esto tengo muy pocos amigos con quién hablar ahora que mi pareja no está.
La maternidad es algo que realmente deseé. Es duro no tener con quién compartirla y que me entiendan, me he sentido juzgada en todos los momentos en que me he preocupado o asustado por mi hija. Siempre tengo miedo; la pérdida de mi primera bebé me marcó por siempre y ahora con mi bebé Emma reflejo este temor. Todos hablan pero no saben lo que se siente.
Siempre estoy enfocada en todas las necesidades de mi bebé, tanto así que a veces me olvido de mis necesidades. Y más en estos momentos que estoy sola. A veces suelo desesperarme con mucha facilidad porque su llanto es un poco fuerte y no sé cómo reaccionar.
Me preocupan cosas que suceden todos los días como cuando no quiere dormir o no quiere tomar pecho. Me encuentro en casa con mi hermana mayor, y ella me ayuda en muchas cosas. Yo sé que tiene sus cosas propias que hacer así que trato de molestarla lo menos posible.
Trato de mantenerme al margen y ocultar mis emociones, me las guardo para mí, ya que cuando hablo con mi pareja sé que él solo quiere saber que estamos bien y yo no quiero preocuparlo con mis cosas.
En mi familia siempre se ha escuchado la frase " Tú la pariste así que tú encárgate" así que hablo poco y pido ayuda cuando es muy necesario, de lo contrario doy todo de mí aunque parezca sobreprotectora.
Hay momentos en los que quedó sola con mi hija y ella se queda dormida es donde empiezo a desahogarme sola y mis lágrimas no se contienen así que aprovecho ese espacio.
Yo misma consuelo mis aflicciones, me doy discursos motivacionales, hablo conmigo misma sobre lo que me molesta y lo que me alegra. Tomo cualquier cosa para el dolor físico que siento en mi espalda o cesárea. Yo misma me abrazo y digo que si puedo porque vale la pena ser la mejor madre para mi hija.
Espero con ansias el reencuentro con mi pareja y compartir todas las experiencias vividas.
Ha sido para mí poder hablarles a plenitud sobre este viaje. Sin lugar a a dudas no ha sido fácil, pero vale la pena cada segundo.
Saludos a todas esas madres. un abrazo desde la distancia.
Hello, friends and beautiful moms of #Motherhood. I hope you are having a nice weekend.
Today I want to join this initiative and tell you a little bit about my journey as a mother since the beginning.
This initiative really catches my attention, because as a mother I can capture what I feel and in one way or another let off steam.
In 2019 together with my current partner we found out that we would be parents of our first baby. At that time we were not fully prepared, we didn't even imagine being parents in such a short time together. For me, it was somewhat difficult to accept that news, but after a few days I started to imagine how my life would be with my partner and my baby.
My first pregnancy was something beautiful, since we were in Colombia, Bogota. My partner had a stable job and we lived in peace and quiet. After 4 weeks of pregnancy I started to control my pregnancy, since being from Venezuela I had to give all the documentation to give birth there.
I never imagined losing my baby. She was born and from that moment on my journey began. With one month and six days I lost her. I can say that this motherhood did not last, it was like dust that fell and then dispersed. I did not experience many things, only fear and sadness. There were very few moments when I could enjoy my baby.
Since then I felt like a part of my heart was ripped out. I always wondered if at some point I could have done something to change the outcome, but I already knew the answer. My daughter was not meant for this world and it was very hard for me to cope with this pain.
Earlier this year, on January 21, Emma, my second baby, was born. The moment I found out I was pregnant with her I was scared, but I was ready to be a mom again. And my partner was very happy. We started planning and imagining what the birth of our little girl would be like, although on the other hand we were afraid because of the history we had with our previous baby.
I have had moments that in some ways have cost me. I have learned a lot and I am still in the learning process. My daughter has taught me about many emotions that I had not had before, or that I had had but did not know how to recognize. I am filled with joy when I see my baby girl every morning wake up with a little face full of joy and smile at me when she sees that I am by her side. The gestures she makes when I hold her in my arms and then feed her at the breast.
Everything went very well, I moved to my mom's house, since she gave me a piece of land where my partner and I plan to build our home, and also, I became closer to my partner.
I can't say that I feel very well, although I have my daughter and she fills my batteries every day, and recharges my heart, there is something missing to us, and I say missing, referring to my baby and me. My husband went to Colombia to be able to give us economic stability and the truth is that we need it very much, especially me.
Since my baby came into our lives I have had a great improvement in my emotions, for the better. But loneliness is something that has hit me hard. With my partner we used to have the habit that at the end of each day we would talk about how we were doing or how we were feeling. I could unburden myself, and so could he, and we would end up hugging while he told me how well I was taking care of Emma. We would pray before bedtime next to our baby. It was something that brought us closer and closer together.
I am a person who has very few friends, I have a hard time trusting and because of this I have very few friends to talk to now that my partner is gone.
Motherhood is something I really wanted. It is hard not having someone to share it with and be understood, I have felt judged every time I have been worried or scared for my daughter. I am always afraid; the loss of my first baby scarred me forever and now with my baby Emma I reflect this fear. Everyone talks but they don't know what it feels like.
I am always focused on all my baby's needs, so much so that sometimes I forget my own needs. Even more so in these moments when I am alone. Sometimes I tend to get desperate very easily because her crying is a little loud and I don't know how to react.
I worry about things that happen every day like when she doesn't want to sleep or doesn't want to breastfeed. I stay at home with my older sister, and she helps me with a lot of things. I know she has her own things to do so I try to bother her as little as possible.
I try to keep to myself and hide my emotions, I keep them to myself, because when I talk to my partner I know he just wants to know that we are okay and I don't want to worry him with my things.
In my family we have always heard the phrase "You gave birth to her so you take care of her" so I speak little and ask for help when it is really necessary, otherwise I give my all even if I seem overprotective.
There are times when I am alone with my daughter and she falls asleep and that is when I start to vent alone and my tears are not contained so I take advantage of that space.
I comfort my afflictions myself, I give myself motivational speeches, I talk to myself about what bothers me and what makes me happy. I take anything for the physical pain I feel in my back or c-section. I hug myself and say yes I can do this because it is worth it to be the best mother to my daughter.
I look forward to reuniting with my partner and sharing all the experiences I have had.
It has been for me to be able to tell you all about this journey. Without a doubt it has not been easy, but it is worth every second.
Greetings to all those mothers. A hug from afar.
Traducción hecha con DeepL.
Fotos tomadas con teléfono Alcatel X1 a excepción de la primera, ya que es la única que tengo en Facebook de mi primera bebé.