Cuatro sueños y un funeral | Relato

“Confía en los sueños, porque en ellos se esconde la puerta a la eternidad.”
Kahil Gibran

Photo by Roman Kraft on Unsplash

“Que fugaz y efímera es la vida; es tan solo un abrir y cerrar de ojos, un instante que dura justo el tiempo que necesitamos para cumplir nuestra misión de vida”. Así pensaba Shaty mientras, invadida por los nervios, recordaba el último sueño que había tenido con su tío, que acaba de fallecer.

Se encontraba en los rezos del novenario, cuando repentinamente vio una gran sombra informe que volaba silenciosamente hacia ella, hasta que chocó violentamente contra la reja que resguardaba la terraza donde se hacía el Rosario; y en ese instante tomó forma de ave negra y emprendió su vuelo. Todos escuchamos el fuerte impacto, pero solo ella logró ver lo que lo había causado.

Los nervios la alteraron, pues la noche anterior había soñado que un grupo de familiares estaban reunidos en la acera frente a la casa de su abuela materna, y al fondo entre la multitud estaba su tío Giorgio; llevaba unos pantalones blancos y una camisa verde que lo hacía resaltar entre los demás; era la misma ropa con la que aparecía en la foto ubicada en el altar donde se hacían los rezos y la misma con la que lo habían enterrado.

Cuando las personas despejaron su campo visual, él la miró fijamente y le dijo: “Epa Shaty, salga más y disfrute de la vida, porque la próxima va a ser usted”. En el sueño ella se hizo consciente de que su tío estaba muerto y en ese instante despertó.

No le habría dado mayor importancia a ese sueño, de no ser porque recordó el mensaje oculto en cuatro sueños anteriores, que precedieron a la muerte de Giorgio y que, cual crónica de una muerte anunciada, habían predicho todo lo que había ocurrido.

PRIMER SUEÑO:

Dos semanas antes del incidente, Giorgio tuvo un vívido sueño, donde Elio, su ex suegro fallecido años atrás, iba por un camino donde estaba él. Al verlo pasar, él le preguntó: Epa señor Elio ¿me voy con usted? y Elio le respondió: “No, a usted no le toca todavía”.

Y aún no le tocaba, pues transcurrieron 15 días desde ese sueño hasta que le dio el infarto y luego 16 días más hasta su muerte.

SEGUNDO SUEÑO:

Una semana antes del incidente, Carmen (hermana de Giorgio) soñó que había salido de la casa y no recordaba el camino de regreso. Luego de caminar y dar múltiples vueltas llega al frente a su casa. Una vecina (gorda de piel negra) viene corriendo hacia ella llorando y la abraza desconsoladamente. Ella no entiende lo que está pasando, pero en ese momento se percata que detrás de la señora está parado Jesús, un amigo de la familia fallecido el año pasado.

Casualmente, la tumba de Giorgio quedó ubicada a 30 metros aproximadamente de la tumba de Jesús.

TERCER SUEÑO:

Tres días antes del incidente, Shaty (sobrina de Giorgio) soñó que iba pasando por el estacionamiento de la casa de la abuela materna y cuando pasa frente a la ventana de bloques de ventilación que da a la terraza de la casa, ve un ataúd allí. Se devuelve para asegurarse de lo que creyó ver, y efectivamente la urna está ahí. Su mirada rápidamente se proyecta frente al ataúd, pero despierta antes de lograr ver quien estaba en su interior.

Sorprendentemente, el velorio se llevó a cabo donde nadie lo hubiera imaginado, en esa terraza; y el ataúd fue ubicado en la misma posición y lugar donde lo soñó Shaty.

CUARTO SUEÑO:

El día del incidente, Giorgio soñó nuevamente, pero está vez estaba en un cementerio. Un hombre con una pala escavaba una fosa y él le preguntó: "Amigo ¿para quién es ese hueco? A lo que el sepulturero le respondió: “Esta es la tumba de Antony” (un amigo fallecido el pasado mes). Cuando mira a un lado ve otra fosa ya cavada y preguntó: ¿y esta otra fosa es para quién? El hombre levanta el rostro y le dice: “Amigo, esa es la suya”, y en ese instante despertó sobresaltado.

Ese mismo día en horas de la mañana, estando solo en los maizales, sufrió un infarto que dañó varios órganos de su cuerpo, lo que le causó la muerte 16 días después de batallar en un hospital.

En el fragor de la lucha por salvar a Giorgio nadie recordó esos sueños, aunque habían sido contados en su momento; pero estoy seguro de que solo Giorgio pudo ver en ellos el mensaje premonitorio de que debía partir, y tuvo 15 días de preparación para ese viaje al más allá.

Hoy, Shaty lucha también contra sus demonios internos, pero ya no mira hacia el futuro; tan solo se centra en el aquí y el ahora, donde está su mayor tesoro: El Presente.

--Texto de mi autoría E.Rivera--

veac211021

Hermandad Kyteler

ENCUENTRO PARANORMAL:

Hacer un post en donde narres una historia, leyenda, experiencia o anécdota paranormal.

Invito a publicar su historia paranormal a @junydoble, hay chance hasta el domingo 31/10.

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
8 Comments
Ecency