Ta vez

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Solo faltaban dos meses para la boda, María había perdido su anillo de compromiso y no sabía como decírselo a su futuro esposo, tan solo recordaba que se lo había quitado porque le calaba al cargar los botes de agua desde la colonia vecina, los cortes en el servicio de agua eran cada vez mas seguido, al principio se limitaban a las horas de la noche, pero ahora pasaban días sin que reconectaran el servicio del vital líquido.

Cesar trabajaba todo el tiempo extra posible para comprar lo mínimo necesario para empezar una vida a lado de su amada. Una pequeña estufa, un refrigerador, un comedor y un sofá eran su meta. En una ocasión su patrón le pidió que se quedara a trabajar unas horas extras, pero ese día había quedado con María de ir al cine por lo que tuvo que decir que no. A partir de ahí ya no le autorizaron mas tiempo extra, Cesar estaba muy intranquilo con esta situación porque pensaba que no completaría.

El día de la boda al fin llegó, fue una ceremonia sencilla con los familiares mas allegados, Cesar y María empezarían una vida juntos. En cuanto llegaron a la casa que habían rentado, Cesar le dijo que le tenía una sorpresa, le tapo los ojos y la llevó al comedor y sorpresa, sobre el comedor había un pequeño televisor. Fue entonces cuando María le hizo la observación de que no había comprado una cama.

-Es cierto, lo olvidé por completo, ahora ¿Donde dormiremos?-

-Supongo que en el sofá- le dijo ella

-Hay algo que tengo que decirte- agregó

-No supe donde dejé el anillo de compromiso-

Cesar estaba aún apenado por haber olvidado comprar una cama.

-No te apures, ahora tenemos estos- le dijo mientras le enseñaba el anillo de bodas

-Tal vez deberíamos ir a ver algo en la televisión antes de dormir- agregó

-Tal vez no- le contestó ella mientras lo jalaba al sofá.


@saulos

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