This is the story of Jaime, a hobbit who lived in an abandoned cave in a far away place, a swamp that had been forgotten and rather exiled from the lands where most people made their lives. Jaime was someone who was very overweight and since his childhood had been set apart from the pack of all the other hobbits. This was because he was unable to perform the activities that all children his age normally did. For example, when it was his turn to have physical education class, all the other normal-weight kids managed to jump from branch to branch, he had a hard time climbing the tree, and the other kids pointed at him and made fun of him, making this arouse a feeling of frustration in our protagonist. He felt bad and felt a lot of anger and hatred towards the other boys, especially because he wasn't accepted within the group, he didn't have that sense of belonging. And so it was that Jaime was isolating himself and living in his own world, not wanting to deal with society. It was only in food that he found his greatest pleasure, enjoying something that he couldn't make fun of and that he liked and that was his passion.

Over the years, it became increasingly difficult for him to find jobs that he could do because the tasks available usually involved large amounts of physical effort, such as cultivating the land, harvesting crops of various foods, or delivering messages via long distance. And our friend couldn't perform those tasks without getting tired. Every three or four steps he took, he was exhausted from breathing, he felt tired and began to sweat profusely.

So, through the years, he realized that since he was an orphan, without fathers or mothers and didn't really have friends, he decided to go and live far away, away from the whole population. Love hadn't knocked on his door either, he hadn't found those kindred souls to help him ease the weight of this burden. He envied non-obese people because they led a life where they could afford to run, climb trees, have friends, walk, and deliver large items, without getting tired, without having all the many problems that he had. He had access to many jobs that he needed to make a living. But Jaime had to go to live far away and had to set up a craft stall with great effort, dedicating himself to selling objects that other merchants later bought from him and sold them to people as haunted objects. Jaime had nothing to do with this, he was only fulfilling his task of creating the craft and the myths and legends that the unscrupulous merchant later sold to the people were something else that had nothing to do directly with him.

And so, Jaime continued his day to day living, but without really a purpose that would feed him and help him move on. What will happen to Jaime in a few years? It is something that is unpredictable and that each of us would like to know, but only our writer will be able to say what Jaime's fate is if he decides to continue this story some other time.

This has been my participation for today's story, I hope you have enjoyed it and I know that Jaime reflects the reality of many people who are alone and abandoned in his house and in a certain way I feel identified with him. I know many of you will be too so thanks for reading today's story and have a nice day.

This is my entry in @mariannewest's daily freewriting challenge. Today's prompt is no obese.

Esta es la historia de Jaime, un hobbit que vivía en una cueva abandonada en un lugar muy lejano, un pantano que había sido olvidado y más bien exiliado de las tierras donde la mayoría de las personas hacían vida. Jaime era alguien que tenía mucho sobrepeso y desde su niñez había sido apartado del grupo de todos los otros hobbits. Esto se debía a que no podía realizar las actividades que normalmente todos los niños de su edad hacían. Por ejemplo, cuando le tocaba la clase de educación física, todos los otros chicos con un peso normal lograban saltar de rama en rama, él tenía dificultades para poder subirse al árbol y los otros chicos lo señalaban y hacían burla de él, haciendo que esto despertara un sentimiento de frustración en nuestro protagonista. Se sentía mal y sentía bastante rabia y odio hacia los otros chicos, sobre todo porque no era aceptado dentro del grupo, no tenía ese sentido de pertenencia. Y así fue que Jaime se fue aislando y viviendo en su propio mundo, sin querer tratar con la sociedad. Encontraba únicamente en la comida su mayor placer, disfrutar de algoque no podía burlarse de él y que le gustaba y que era su pasión.

Con el paso de los años, cada vez le fue más difícil poder encontrar trabajos que pudiera realizar debido a que las tareas disponibles normalmente involucraban grandes cantidades de esfuerzo físico, como cultivar la tierra, recoger las cosechas de distintos alimentos o entregar mensajes a través de largas distancias. Y nuestro amigo no podía realizar esas tareas sin cansarse. Cada tres o cuatro pasos que daba, se agotaba su respiración, se sentía cansado y comenzaba a sudar muchísimo.

Así que, a través de los años, se dio cuenta de que como era alguien huérfano, sin padres ni madres y no tenía realmente amigos, decidió irse a vivir alejado, afuera de toda la población. El amor no había tocado tampoco a su puerta, no había encontrado esas almas gemelas que lo ayudaran a aliviar todo el peso de esta carga. Él envidiaba a los no obesos porque llevaban una vida en la que podían permitirse correr, subir a los árboles, tener amigos, caminar y entregar grandes objetos, sin cansarse, sin tener toda esta cantidad de problemas que él tenía. Teníaacceso a muchos trabajos que él necesitaba para poder vivir. Pero Jaime tuvo que irse a vivir lejos y tuvo que con mucho esfuerzo montar un puesto de artesanía, dedicarse a vender objetos que luego otros comerciantes le compraban y se los vendían a la gente como objetos embrujados. Jaime no tenía nada que ver en esto, él cumplía únicamente con su tarea de crear la artesanía y los mitos y leyendas que luego el comerciante inescrupuloso le vendía a la gente eran otra cosa que no tenían que ver directamente con él.

Y así, Jaime seguía su día a día viviendo, pero sin realmente un propósito que lo alimentara y que lo ayudara a seguir adelante. ¿Qué pasará con Jaime dentro de unos años? Es algo que es impredecible y que cada uno de nosotros quisiera saber, pero solamente nuestro escritor podrá decir cuál es el destino de Jaime si en alguna otra oportunidad decide continuar esta historia.

Este ha sido mi participación para el relato del día de hoy, espero que lo hayan disfrutado y sé que Jaime refleja la realidad de muchas personas que están solas y abandonadas en su casa y en cierta manera me siento identificado con él. Sé que muchos de ustedes también lo estarán así que gracias por leer el relato del día de hoy y que tengan un buen día.

Esta es mi participación en el desafío diario de escritura libre de @mariannewest. El prompt de hoy es no obeso.