Capítulo 444 - Trono Milagroso

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Un destacado investigador en un mundo de cultivo despierta 30.000 años en el pasado luego de un accidente de investigación, está en el cuerpo de un joven de pasado muy desgraciado, sin posibilidades de regresar y buscando mejorar su vida decide crear un emporio de comercio e investigación que cambie el mundo y cree “milagros” gracias a su ventaja en conocimientos de técnicas e inventos.

Con la ayuda de dos hermanas y luego un grupo de aliados, emprenderá el camino a un rápido ascenso, enfrentando intereses establecidos, Familias despóticas, tiranos de todo tipo, enemigos de distintas razas, países e Imperios que ya dominan el Continente.

Que todos se preparen para el imparable ascenso del Comercio Milagroso, la empresa que crea los Milagros que cambiaran el futuro del mundo para siempre.


Capítulo 444 - Cayendo en una trampa

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Vivian conocía a los druidas antes de llegar a Ciudad Milagrosa. Se dice que los druidas se comunicaron con la naturaleza y usaron técnicas extrañas para transformar sus cuerpos, lo que les permitió convertirse en bestias demoníacas. Podían transformarse libremente en todo tipo de bestias demoníacas, desde pajaritos hasta pequeñas bestias.

Esta transformación no fue solo un cambio de forma.

La parte más fuerte de los druidas fue que convirtieron completamente sus cuerpos en bestias demoníacas, incluso replicando sus habilidades. Esto era algo que las técnicas de cultivo no podían lograr e incluso las antiguas técnicas de demonios no podían lograr.

Al venir al templo druida con Chu Tian esta vez, naturalmente Vivian estaba muy curiosa e inmediatamente miró a su alrededor. Los druidas no eran muy amistosos, pero aun así se movieron hacia los lados y no se atrevieron a mostrar ninguna expresión. Después de todo, Chu Tian era ahora el Señor de la Ciudad Milagrosa y los druidas realmente necesitaban su ayuda.

En una plataforma de piedra en el centro del templo, el cuerpo de menos de un metro del Profeta Yoda se encontraba actualmente en una matriz de energía que mantiene la vitalidad, con dos Sumos Sacerdotes Druidas haciendo guardia.

¿Esta fue la legendaria habilidad de predicción de los Profetas?

Vivian se preguntó. Los legendarios profetas, sabios y fuertes, se dice que parecían duendes, pero eran completamente diferentes de lo que ella imaginaba. El Profeta Yoda parecía una rana deshidratada en este momento, como una corteza completamente seca. Aunque no había heridas visibles en la superficie, su vitalidad ya estaba completamente agotada.

Vivian dijo: "Estas son lesiones graves, no puede aguantar mucho más".

Estas palabras atrajeron la insatisfacción de los otros druidas. Hubo un druida que dijo con voz pesada: "El Profeta resultó herido en la batalla con el Dragón Exánime y lo hemos tratado con los métodos y la medicina que el Señor de la Ciudad envió, pero sus heridas anteriores volvieron a estallar y causaron que el cuerpo del Profeta". fallar. No tenemos tiempo para recolectar más materiales".

Chu Tian asintió levemente.

"¿Qué estás esperando todavía?" Un sumo sacerdote druida hombre oso gritó ansiosamente: “Ya que el Señor de la Ciudad ha encontrado el método para curar al Profeta, ¡deberías hacer tu movimiento ya! ¿No ves que la vida del Profeta está en peligro?"

"Oye, ¿por qué estás gritando, dónde están tus modales?" Vivian era un elfo, por lo que no le gustaba este tipo de bestias espirituales feroces. Ahora que él estaba mostrando este tipo de modales, ella se sentía muy infeliz, "Nuestro hermano mayor Chu Tian está aquí para ayudar y eso te está poniendo cara a los druidas, pero ahora parece que te debemos algo".

El hombre oso Druida Sumo Sacerdote estalló y su boca no pudo ser tapada, “Humph, si no fuera por los Druidas que ayudaron a luchar contra la Religión No Muerta, ¿las viejas heridas del Profeta estallarían? Si no fuera por la ayuda del druida, Ciudad Verde ya habría sido exterminada. ¡¿Este humano se convertiría en el Señor de la Ciudad y habría una Ciudad Milagrosa?! ¡No está mal decir que nos debes una!"

"Tú..." Vivian sólo había dicho esto casualmente, pero nunca pensó que este druida sería tan irrazonable. Hizo un puchero y se mordió los labios. “Si la ciudad fue destruida, ¿cómo podrían escapar los druidas? Lo dices como si los druidas fueran desinteresados, ¡pero solo te estabas salvando a ti mismo! Si no fuera por el hermano mayor Chu Tian matando al Lich, sin mencionar a tu Profeta, todos los druidas no hubieran podido regresar con vida. ¿Cómo quiere calcular esta deuda?"

El hombre oso, el Sumo Sacerdote, se limitó a mirarla.

"¿Mirándome? ¡Quieres pelear!" Vivian no era tan violenta como Nangong Yun, pero además de ser obediente frente a Chu Tian y Meng Qingwu, ¿cómo podía temer a los demás? Volteó su manga y reveló una muñeca blanca como la nieve, "¡Un oso tonto como tú, ya he vencido a diez de ustedes antes!"

"¡Buscando la muerte!"

El hombre oso Sumo Sacerdote Druida rugió enojado cuando su cuerpo lanzó una luz deslumbrante. Su cuerpo se infló cinco o seis veces y la armadura que lo rodeaba casi explotó. Su pelaje creció salvajemente cuando se convirtió en una bestia gigante.

Vivian entrecerró los ojos y su energía espacial vibró cuando apareció una daga, liberando un aura fuerte. Se fijó instantáneamente en las bestias gigantes y fue como si la daga pudiera cortar el otro lado con el más mínimo movimiento.

¡Espíritu fuente atribuido al espacio!

Todos los druidas se sorprendieron.

Vivian parecía tener alrededor de catorce años, pero su cultivo no era bajo, actualmente alcanza el pico de la cuarta capa de espíritu verdadero. Sin mencionar que tenía la energía espacial que la gente normal no podía bloquear, por lo que no le resultó difícil matar a varios druidas de nivel Sumo Sacerdote.

Los druidas se volvieron cautelosos y se prepararon para hacer un movimiento.

Chu Tian cruzó las manos como si estuviera viendo una obra de teatro, pero su corazón susurraba en secreto. Estos druidas realmente no tenían sentido, si estos tipos que solo seguían su propia mente no se limpiaban, podrían causar muchos problemas a Ciudad Milagrosa en el futuro.

"¡Detener!"

Un Sumo Sacerdote Druida se destacó.

Esta era una bestia espiritual halcón rara vez vista. Tenía un par de alas y dos garras de halcón en las piernas. Los hombres halcón no tenían un temperamento tan violento como los hombres oso, por lo que inmediatamente se destacó para detener esto: “El Señor de la Ciudad tuvo la amabilidad de venir a curar al Profeta y tú todavía quieres atacarlos, ¿a la religión druida no le importa la rectitud? ¿Es esto lo que nos enseñó el Profeta?"

"Si quieres pelear, no me importa". Chu Tian dijo con calma: “Solo que creo que me olvidé de presentarte. Esta es Vivian del Bosque Eterno, es la vice-señor de la ciudad de Ciudad Milagrosa y la hija del Rey Elfo del Bosque Eterno, así como un talento poco común entre los elfos".

Estas palabras fueron como truenos cayendo sobre los druidas.

‘¿La hija del Rey Elfo?’

‘¿Esta chica elfa era en realidad la hija del Rey Elfo?’

El sumo sacerdote hombre oso se detuvo de inmediato y volvió a su forma original. Incluso si los druidas fueran rebeldes, ¿estarían dispuestos a atacar a la hija del Rey Elfo? Sin mencionar si podían ganar o no, solo basándose en el Bosque Eterno que representaba el Rey Elfo, no era algo en lo que ninguna influencia pudiera ir en contra.

"Disculpas, los druidas fueron impulsivos esta vez". El Halcón Alto Sacerdote miró al hombre oso antes de moverse frente a Chu Tian y Vivian, “Mientras puedas salvar al Señor Profeta, los druidas están dispuestos a pagar cualquier precio. Esperamos que el señor de la ciudad pueda aceptar esto".

"Por supuesto que no me importa". Chu Tian no estaba enojado en absoluto, “Sin embargo, dado que a los druidas les gusta calcular las deudas, yo debería hacer lo mismo. Dijiste que Yoda trajo gente para luchar contra el Lich, puedo estar de acuerdo en este punto. Sin embargo, las cosas no pueden existir sin una base. Los druidas no hicieron ningún movimiento por la ciudad y también salvé a Yoda del Dragón Exánime, además de enviarle medicinas inmediatamente después de regresar a la ciudad, por lo que podemos ser considerados incluso en esta parte".

El hombre halcón Sumo Sacerdote Druida se veía muy incómodo, "¡Sí, el Señor de la Ciudad tiene razón!"

"Entonces vamos a contar el resto". Chu Tian sacó una píldora de médula estelar, “Para salvar al gran maestro Yoda, este señor de la ciudad llevó personalmente a la gente al mundo subterráneo para matar dieciocho bestias feroces y recogió ocho hierbas inmortales para refinar esta píldora con una receta antigua. Creo que no hay comida gratis en este mundo y no quiero que sea demasiado cara, ¡así que diremos que puedes comprarla por quinientas mil piedras originales!

¿Quinientas mil Piedras de Origen?

¿Cómo podían los druidas tener tantas Piedras de Origen?

¡Los druidas no tenían ninguna fuente de ingresos!

Sin mencionar quinientos mil, ¡ni siquiera pudieron sacar cincuenta mil o incluso cinco mil!

Chu Tian guardó la píldora, “Este señor de la ciudad todavía está ocupado, así que me iré primero. Cuando tengas suficiente dinero, ven a buscarme".

Después de decir esto.

Chu Tian comenzó a irse.

"¡Señor de la ciudad!" Todos los druidas comenzaron a entrar en pánico, "¡No puedes no tener consideración por los sentimientos de los demás!"

“¿Sin consideración? Quería expresar mi gratitud, pero querías beneficiarme de mí ". Chu Tian se encogió de hombros, “Seré franco, los druidas para mí son solo un grupo de ladrones que no pueden reconocer lo bueno de lo malo, entonces, ¿por qué tengo que poner cara? Si salvo a Yoda hoy, quién sabe si no me derrocarán unos días después. En lugar de correr este riesgo, también podría dar el primer paso".

Los druidas empezaron a sudar frío...

Las palabras que dijo Chu Tian casi parecían querer ir en contra de los druidas.

Ahora que la Ciudad Milagrosa estaba controlada por Chu Tian, ​​no solo contaba con el apoyo de los gnomos, también contaba con el apoyo de los chamanes y muchas tribus locales. Si Chu Tian quería moverse contra los druidas, ¡definitivamente podría erradicar a los druidas mientras Yoda estaba gravemente herido!

"¡Vivian, nos vamos!"

Vivian liberó su energía espacial y se preparó para llevarse a Chu Tian.

"¡Señor de la ciudad!"

"¡Espere por favor!"

Todos los druidas corrieron.

La expresión del sumo sacerdote hombre oso cambió, ya que sabía que causaba muchos problemas. Este aparentemente tranquilo señor de la ciudad en realidad no era una persona sencilla, "¡Estoy dispuesto a prometer en nombre del Dios Chamán que juraremos lealtad a Ciudad Milagrosa y no haremos nada que cause problemas a los chamanes!"

Chu Tian levantó la mano.

Vivian detuvo la teletransportación espacial.

Los otros druidas sabían qué hacer e inmediatamente juraron que no traicionarían a Ciudad Milagrosa. Los druidas se comprometieron con esto con el nombre de Dios espiritual, por lo que se podía creer en esta promesa.

“A este señor de la ciudad no le gusta pelear. ¿No es mejor si todos viven felices y ganan dinero juntos?" Chu Tian negó con la cabeza y dijo: “El Profeta Yoda es un hombre sabio y Ciudad Milagrosa necesita hombres sabios ahora. Aunque me has decepcionado mucho, estoy dispuesto a darte un descuento. ¡Cien mil Piedras de Origen!"

Los druidas querían llorar, pero no tenían lágrimas: "¡Señor señor de la ciudad, los druidas no tenemos ninguna propiedad, no podemos sacar tanto!"

Otro sacerdote druida dijo: "Piedras de Origen, podemos devolverlas lentamente, ¡pero la situación del Profeta no se puede retrasar!"

"¡Tienes razón!" Chu Tian se palmeó el pecho y sacó varios pergaminos: “Entonces, primero firme estos contratos espirituales. El templo de los druidas puede deberle a Ciudad Milagrosa cien mil Piedras de Origen y puedo hacer que los druidas trabajen en Ciudad Milagrosa durante tres años para devolver esta deuda. Este contrato solo necesita ser firmado por cada Sumo Sacerdote. Siempre que aceptes esta condición, salvaré al Profeta de inmediato".

Esto no se pensó en el acto...

Ya había preparado estos contratos...

Incluso si tuvieran un cerebro diminuto, podrían decir que habían sido atrapados por el Señor de la Ciudad, pero ¿qué podían hacer?

"¡Firmar!"

"¡Firmaremos!"

Cien mil Piedras de Origen no era una cantidad pequeña, pero para salvar al Profeta Yoda, los druidas estaban dispuestos a pagar cualquier precio. El hombre oso, el Sumo Sacerdote Druida tomó la iniciativa, ya que todos los Sumos Sacerdotes firmaron el contrato de Chu Tian.

Chu Tian reveló una sonrisa astuta como si su plan hubiera tenido éxito.

‘Una vez que caes en la trampa, ¿aún puedes huir?’


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