Capítulo 0262 - El hijo abandonado más fuerte

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Un cultivador despierta en el mundo moderno, está en un mundo extraño para él, encarnado en el cuerpo de un joven señorito de una familia distinguida, pero uno que es un desperdicio impotente y que ha sido abandonado y despreciado. Ahora busca maneras de aumentar su fuerza en este mundo sin energía de cultivo y trazar su camino de retorno para cobrar su venganza.


Capítulo 0262 - Doctor Mágico

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“Jaja, eres realmente gracioso. Todavía huele a la leche materna de su madre y probablemente solo haya leído algunos libros de texto, pero dice que puede curar la necrosis de la médula ósea y los huesos pulverizados. ¿Por qué todas las personas ahora son tan arrogantes y jactanciosas?" El doctor Liu volvió a su oficina y maldijo. Obviamente, Ye Mo lo enfureció.

“Todos los jóvenes de hoy son así. Viejo Liu, usando las palabras de mi hija, 'Si las tomas en serio, pierdes', jaja…” Otra doctora de mediana edad en la esquina se rió.

El doctor Liu le dio unas palmaditas en la cabeza. “Eso es cierto, el insolente no tiene miedo. ¿Por qué estoy enojado con una persona tan joven? Solo estoy haciendo sufrir al paciente".

….

"Señor, no debe tocar al paciente". Una enfermera entró y detuvo a Ye Mo.

Ye Mo la tiró casualmente hacia un lado y las agujas doradas en su mano aterrizaron en la pierna de Chong Yuanyuan en una ráfaga de sombras. La enfermera quedó atónita por los movimientos de Ye Mo.

También había un médico de medicina china en su hospital, e incluso el ejecutivo del hospital era un viejo médico de medicina china. Sus habilidades eran muy fuertes, y ella también había visto al viejo doctor usar acupuntura, pero no era tan rápido. Después de su conmoción, comenzó a sospechar si este joven realmente tenía habilidades.

Pero momentos después, reaccionó. Independientemente de si esta persona realmente tenía habilidades, no era algo que pudiera decidir. Tenía que informar de esto al hospital de inmediato. Un forastero estaba practicando medicina en su hospital. Esto no fue poca cosa.

A nadie le importaba la enfermera que se escapó, pero la madre de Chong Yuanyuan se sorprendió. Tal velocidad, no podría alcanzarse incluso si no se usaba ninguna aguja.

Chong Yuanyuan simplemente sintió que sus huesos eran constantemente perforados por la aguja y la aguja se extraía muy rápido. Ni siquiera podía sentir cuándo entró y cuándo salió. Simplemente sintió un poder cálido moviéndose alrededor de los huesos de sus piernas. Incluso podía sentir que el poder la hacía sentir muy cómoda.

Incluso se olvidó de avergonzarse cuando Ye Mo puso su mano sobre sus costillas rotas cerca de su pecho. Esto era demasiado insondable.

La enfermera salió corriendo por la puerta y vio a una mujer de mediana edad vestida de manera regia que bajaba del piso de arriba. Se apresuró y dijo: "Ejecutivo Hu, alguien está tratando a un paciente en nuestro hospital y no es un médico de nuestro hospital".

La ejecutiva Hu escuchó esto y su rostro se hundió, inmediatamente dijo: “Llame a seguridad para detenerlo de inmediato. ¿Que está haciendo él ahora?"

“Está usando acupuntura para tratar a la paciente de la habitación 203 en la herida de su pierna. Sin embargo, su velocidad es absurdamente rápida y ni siquiera puedo verla ”, dijo rápidamente la enfermera.

"¿Acupuntura? ¿203? ¿La hija de la mujer que lloró en mi oficina la última vez?" La ejecutiva Hu lo recordó. Esta mujer no podía soportar que su hija tuviera que ponerse piernas falsas y llorara.

“Es ella”, respondió la enfermera.

"Oh espera. Primero iré a echar un vistazo. Oh, no importa, estoy ocupada". Ejecutivo Hu parecía haber recordado a la mujer de mediana edad que estaba a su lado.

La mujer parecía estar pensando y cuando escuchó las palabras del ejecutivo, sonrió y dijo: "Esta persona es interesante, en realidad quiero ir a ver".

Ejecutivo Hu quería ver cómo esta persona iba a tratar al paciente con acupuntura y ahora que la mujer de mediana edad preguntó, accedió de inmediato. "Okey. En ese caso, vámonos".

Ye Mo sabía que dos personas entraron en la habitación. Pero no sabía que era el ejecutivo del hospital. Incluso si lo hiciera, no diría nada mientras el ejecutivo no detuviera su tratamiento.

Hu Yang miró los movimientos de Ye Mo y se sorprendió. Comenzó con la medicina china y era muy competente en la medicina china. Sin embargo, nunca había visto a alguien que pudiera usar la acupuntura como Ye Mo. Sus dos manos eran como una ráfaga de sombras. Las agujas de sus manos entraban y salían de la piel. Incluso él no podía ver exactamente dónde entraron las agujas, mucho menos ver qué punto de chakra era.

Las 108 agujas doradas con el chi espiritual de Ye Mo recuperaron continuamente los huesos de Chong Yuanyuan y sus costillas. Tan pronto como notaba que estaba fuera de lugar, usaba el sentido espiritual para sentirlo y su chi para moverlo de regreso a su lugar y estabilizarlo.

A medida que Ye Mo continuó su tratamiento, Chong Yuanyuan se volvió cada vez más alegre. Ella podía sentirlo más. El entumecimiento y el dolor desaparecieron gradualmente y ahora podía sentir sus piernas cada vez más. Incluso sintió que podía empezar a caminar ahora.

Aunque Ye Mo estaba en la etapa 3 de acumulación de chi, esto ejercía una gran cantidad de chi por lo que no podía mantener este ritmo. El sudor seguía saliendo de su frente. Tang Beiwei sacó un pañuelo y limpió con cuidado el sudor de Ye Mo por él.

Hu Yang y la otra mujer de mediana edad estaban en estado de shock. Sabían que habían conocido a un maestro hoy. Este fue un verdadero maestro. Incluso la madre de Chong Yuanyuan sabía que Ye Mo tenía grandes capacidades.

Después de una hora, Ye Mo jadeó y le dio una pastilla a Chong Yuanyuan, "Está hecho, come esto". Chong Yuanyuan tomó la píldora con alegría y ni siquiera lo pensó antes de comerla.

"Yuanyuan, ¿cómo te sientes ahora?" Preguntó desesperada la madre de Chong Yuanyuan.

Chong Yuanyuan intentó mover la pierna y pudo levantarla. Inmediatamente dijo con sorpresa y alegría: “Mamá, siento que mi pierna está completamente bien. Incluso puedo caminar por el suelo. Y tampoco siento más peso en mi pecho ". Luego, se dio cuenta de que Ye Mo realizaba acupuntura en su pecho y se sintió un poco avergonzada.

Ye Mo sonrió. “No puedes caminar todavía. Tienes que esperar una semana antes de poder caminar libremente". Después de nutrir sus huesos con su chi, necesitaría descansar durante una semana y para entonces, estaría completamente recuperada.

La madre de Chong Yuanyuan estaba tan emocionada que estaba a punto de inclinar la cabeza en el suelo ante Ye Mo, pero Ye Mo la levantó rápidamente.

"Gracias. Si mi Yuanyuan realmente tuviera que tener una pierna falsa, realmente no sabría qué hacer. ¡Gracias, Gracias! Los médicos de este hospital son inútiles. Siempre dicen piernas falsas". La madre de Chong Yuanyuan ni siquiera notó a Hu Yang detrás de ella mientras juraba.

A Hu Yang ni siquiera le importaron las palabras de la madre. Pareció en estado de shock cuando Ye Mo empacó las agujas doradas. Miró a Chong Yuanyuan, que ahora podía levantar la pierna, y suspiró después de un rato. Se acercó a Ye Mo y se inclinó. “Dios de los doctores, Dios de los doctores. He visto el caso de Yuanyuan y soy el que más conozco, pero en realidad lograste curarlo en tan poco tiempo. Hoy he ampliado mi visión. Realmente siempre hay una montaña que es más alta que otra".

Ye Mo estudió a Hu Yang antes de preguntar: "¿Quién eres?"

Hu Yang inmediatamente sacó una tarjeta de identificación y se la entregó a Ye Mo respetuosamente. “Soy el ejecutivo de este hospital, Hu Yang. ¿Puedo preguntar por su digno apellido?"

En este momento, Hu Yang ya no se atrevía a tratar a Ye Moas como un novato. En su corazón, Ye Mo era un dios. Si pudiera mantener aquí a un médico divino como Ye Mo, tal vez el Hospital Tan Kang se convertiría en un hospital de renombre mundial.

"Oh, soy Ye Mo". Ye Mo tomó la tarjeta de presentación y miró. Podía decir lo que quería Hu Yang mirándolo a los ojos, pero eso era imposible.

Como si al ver que Ye Mo no estaba demasiado entusiasmado con el ejecutivo del hospital, la mujer que estaba al lado de Hu Yang se acercó con cuidado.

"Señor. Sí, hola. Soy Pang Haixiang de la corporación Hong Kong Da Di. Estoy asombrado por sus habilidades médicas hoy. ¿Puedo tener el honor de cenar contigo?" La mujer adinerada junto a Hu Yang también tenía los ojos llenos de fervor. Sin embargo, sus ojos eran más de deseo que de fervor. Sacó una tarjeta de presentación, que en realidad estaba hecha de oro puro.

Ye Mo sonrió. "Lo siento, no tengo tiempo". Luego se volvió hacia Chong Yuanyuan y le dijo: “Yuanyuan, si tienes tiempo, vamos a comer juntos en unos días. Gracias por ayudar a Beiwei".

"Okey. Hermano Ye Mo, gracias. Si no fuera por ti, realmente no sabría qué hacer ". La pierna de Chong Yuanyuan se curó y volvió a su felicidad.

La madre de Chong Yuanyuan tenía un rostro lleno de gratitud. Sin embargo, simplemente no sabía qué decir para agradecer a Ye Mo.

Ye Mo solo dijo que no tenía tiempo para comer, pero luego invitó a Chong Yuanyuan a comer frente a sus caras. Esto hizo que Hu Yang y esa rica dama se sintieran bastante incómodos.

Sin embargo, a esa rica dama no le importó en absoluto y se acercó con respeto e ingenio. "Señor. Sí, lo siento, sé que esto es muy grosero por mi parte, pero mi esposo no ha podido levantarse de la cama debido a su enfermedad. Está a punto de... así que... vine al Hospital Tan Kang para pedir prestada una hierba china al ejecutivo de Hu. Sin embargo, no esperaba encontrarte aquí. Sé que eres un maestro, así que deseo pedirte que... " Entonces, los ojos de la mujer adinerada se pusieron rojos. Parecía que se preocupaba mucho por su marido.

Ye Mo frunció el ceño. No estaba interesado en tratar enfermedades. Solo no quería ver a Chong Yuanyuan perder la esperanza y, por lo tanto, la ayudó. Debería haber cerrado la puerta antes.

Al ver que Ye Mo no hablaba, la mujer se acercó con cuidado y dijo: "Siempre que cure a mi esposo, estoy dispuesta a pagar cualquier precio".

Ye Mo suspiró. No tenía el corazón de piedra. Dado que la mujer dijo esto, si él lo rechazara de nuevo, sería demasiado inhumano.

Pensando en ello, dijo: “Está bien, esta es la única excepción. Haga que la gente envíe a su esposo aquí. Vendré a tratarlo dos noches después".

La mujer adinerada se llenó de alegría de inmediato: “Gracias, muchas gracias Dios, doctor Ye. Me pondré en contacto con ellos de inmediato".

Ye Mo asintió y justo cuando quería hablar, sonó un ataque de sirenas. Cinco coches de policía entraron en el hospital y más de 10 policías entraron y rodearon a Ye Mo con armas de fuego.


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