Esa noche fui a dormir temprano y aunque era la última noche del año, estando solo en casa, después de una buena cena pero sin nadie para conversar irme a la cama pareció la mejor idea.
Uno entra en ese limbo entre en vigilia y sueño, en ese pasadizo que lleva al umbral de otros mundos del inconciente. De repente, algo me abstrajo de mi camino hacia el mundo de sueño. Sentí una mano posarse firmemente en mi almohada.
Dudé un segundo si ignorarlo o despertarme del todo pero de inmediato senti como la mano se aproximaba hacia mí recorriendo la extensión de la almohada. Me volteé de inmediato. Nada. Solo penumbra. En el rincón más cercano me parecía ver una oscuridad mucho más absoluta que la del resto de la habitación.
Me acosté boca arriba, semiparalizado de miedo y sentía un frío intenso vieniendo debajo de la cama a pesar de estar bien arropado. Respire, traté de calmarme, pero la idea de que me hallaba solo en aquella situación inundó mi ser de angustia. Juro que traté de gritar pero no pude.
Solo atiné a preguntar: ¿Qué quieres? ¿Quién eres? ¿Puedo ayudarte?
Por respuesta solo oí el recorrido de leves pasos por el piso de la habitación, pequeños piececitos... O dedos tal vez. Insistí en preguntar y a cada pregunta por respuesta algun objeto se caía o se movía. El miedo hizo nido en mi garganta y solo lo maldije. Lo maldije con toda la fuerza que era capaz en aquella madrugada. Pareció detenerse por un minuto. De repente senti una mano posarse en el borde de la cabecera de la cama y en el oido una voz susurrando: Vete!
Con la voz un frío glaciar recorrió mi alma, como pude me levante y camine hacia el interruptor de la luz como si atravesara telarañas. Cuando prendí la luz pareció que toda la oscuridad escapó por la ventana. Aun escribiendo estas líneas siento el frío en la espalda.
That night I went to sleep early and although it was the last night of the year, being alone at home, after a good dinner but with no one to talk to, going to bed seemed the best idea.
One enters that limbo between waking and dreaming, in that passageway that leads to the threshold of other worlds of the unconscious. Suddenly, something abstracted me from my way to the dream world. I felt a hand rest firmly on my pillow.
I hesitated for a second whether to ignore it or wake up completely but immediately I felt the hand approaching me, running along the extension of the pillow. I turned around immediately. Anythin. Only twilight. In the closest corner I seemed to see a much more absolute darkness than the rest of the room.
I lay on my back, semi paralyzed with fear and felt an intense cold coming under the bed despite being well wrapped up. Breathe, I tried to calm myself, but the thought that I was alone in that situation flooded my being with anguish. I swear I tried to scream but couldn't. I only managed to ask: what do you want? Who are you? I can help.
In response, I only heard the path of light steps across the floor of the room, little feet ... Or fingers perhaps. I insisted on asking and to each question for an answer some object fell or moved. Fear made a nest in my throat and I just cursed it. I cursed him with all the force I was capable of in that early morning.
It seemed to stop for a minute. Suddenly I felt a hand settle on the edge of the head of the bed and in my ear a voice whispering: Go away! With the voice an icy cold ran through my soul as I could get up and walk towards the light switch as if through cobwebs. When I turned on the light it seemed that all the darkness escaped through the window. Even writing these lines I feel the cold on my back.
