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Has it ever happened to you that it has cost you to deliver your burdens to the Lord? This is usually frequent at times. We have a hard time entrusting our struggles to him, certainly trusting the sufficiency of his power and the perfection of his plans far more than the best we can even think of even when we believe we have a better plan.
Many times we come with old customs or we are simply stubborn in believing that everything depends on our strength, although we must submit our will and strive to achieve our goals, we see the final result from the hand of God, with our faith deposited in his designs.
Humble yourselves, then, under the mighty hand of God, so that he may exalt you when the time is right; 7 Casting all your anxiety on him, because he cares for you.
1 Peter 5:6-7
After knowing all this, and that the Lord invites us to deposit our burdens on him, we can ask ourselves the following: Why don't we do it? We only remember when we react in the midst of unhappiness because of try to carry us all the loads. Wisdom is opposed to us carrying the full weight of our anxiety and worries, God tells us to let go of worry and anxiety in order to find peace. For this to happen especially when worries come into our lives, we can follow a formula, "Humble yourselves".
This seems very simple, but the reality is that most people continue to fight with their strength without asking God for help, those who humble themselves, those who recognize God's sufficiency are the ones who get help. We conclude that if our way doesn't work, let's just do it God's way.
When we humble ourselves, Two displays his help and everything we need to get out of where we are, leads us to live a full life, let's leave our worries at his feet.
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¿Alguna vez te ha sucedido que te ha costado entregar tus cargas al señor?, esto suele ser frecuente en algunos momentos. Nos cuesta confiarle nuestra luchas confiar ciertamente en la suficiencia de su poder y la perfección de sus planes mucho mas de lo mejor que nosotros podemos siquiera pensar aún cuando creemos que nosotros tenemos un mejor plan.
Muchas veces venimos con viejas costumbres o simplemente somos tercos en creer que depende todo de nuestras fuerzas, si bien debemos someter nuestra voluntad y esforzarnos para cumplir nuestras metas, el resultado final lo vemos de la mano de Dios, con nuestra fe depositada en sus designios.
Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; 7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
1 Pedro 5:6-7
Después de saber todo esto, y que el Señor nos invita a depositar nuestras cargas sobre él podemos preguntarnos lo siguiente: ¿Por que razón no lo hacemos?, solamente nos acordamos cuando reaccionamos en medio de la infelicidad por causa de tratar de llevar nosotros todas las cargas. La sabiduría es opuesta a que nosotros llevemos todo el peso de nuestra ansiedad y preocupaciones, Dios nos dice que dejemos de lado la preocupación y la ansiedad para poder hallar paz. Para que esto suceda sobretodo cuando las preocupaciones llegan a nuestra vida, podemos seguir una fórmula, "Humillaos".
Esto parece muy simple, pero la realidad es que la mayoría de las personas sigue luchando con sus fuerzas sin pedir ayuda a Dios, quienes se humillan, quienes reconocen la suficiencia de Dios son quienes obtienen ayuda. Concluimos que si de la manera en que nosotros lo hacemos no funciona, simplemente hagamos de la manera de Dios.
Cuando nos humillamos, Dos despliega su ayuda y todo lo que necesitamos para salir de donde estamos, nos lleva a vivir una vida plena, dejemos en sus pies nuestras preocupaciones.
Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.
