Así es un día en mi tierra llanera //¡cuánto te extraño!

Hola mis corazones bellos, feliz Miércoles para ustedes, espero estén teniendo un lindo y provechoso día, hoy me desperté muy temprano son sueño y enseguida me transporte mentalmente a una mañana en mi querida tierra natal Calabozo - Guarico solo me quedé acostada recordando lo hermoso que es vivir en esas tierras y fue así como he llegado hasta aquí a describir en letras un día desde inicio a fin en casa de mi madre, así que aquí les cuento mientras imagino tan de cerca este día.

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Las mañanas comienzan con el sonido de los platos en la cocina a las 5:00 A.M pues mi madre quien ya da la bienvenida al día, lo primero que monta a cocinar es el café, un café que lo llaman certero es bien fuerte y puro, no tanta azúcar es la primera colada y es muy distinto al del resto del día, ésa taza de café es el mejor buenos días, te despierta aún estés aún dormido pues como les comento es puro y bien sabroso; perfecto para comenzar una conversar con mi madre mientras ella comienza a amasar las arepas que no faltan en las mañana, gorditas para rellenar con mantequilla y queso duro, ese queso llanero que es bastante característico por su firmeza. De esta forma cualquiera inicia un día con buen pie.

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¡Amanece más temprano! Pues las labores se deben hacer a tempranas horas para estar desocupados antes del medio día, si hay que hacer compras deben ser a esas primeras horas de la mañana, ya a las diez está mi querida vieja dispuesta a cocinar el almuerzo, independientemente de lo que se escoja para almorzar siempre habrá una olla montada con granos para acompañar, negros, blancos, marrones, verdes como sean son el acompañante para quien desee acompañar su comida. Una vez que está listo ; vamos todos a la mesa a almorzar en familia, ya mi madre sabe la porción de cada quien, resta es comer y disfrutar de los alimentos.

Es una zona bastante calurosa, un ambiente caliente sobre todo al medio día luego de almorzar, es entonces el momento ideal para ir al fondo del hogar para reposar en un chinchorro al compás de la brisa fuerte de las matas grandes de mango que se encuentran dispuestas a dar sombra a todos, por eso es que el patio es perfecto para reposar la rica comida y combatir el calor, aunque los baños continuos también los extraño. Por eso es que aquí en dónde estoy en Oriente, me pega fuerte el frío, ya que es una zona bastante fría en comparación con el llano.

Y es así como se va el día en mi casa, aparte del trabajo y responsabilidades; ya cuando va callendo la tarde comienza mi madre a preparar la cena, muy temprano; a las 5 ya la veo en la cocina inquieta viendo que preparar aunque de costumbre es arepa con algo, muy poco la cena es pan de hecho lo comemos como especie de merienda en eso de las 4 de la tarde cuando comienzan los olores de las panaderías cercas a hacer presencia, un pan pequeño, bastante crujiente, medio duro! Es una de las comidas que extraño, el pan de aquí es mas blanco y como suave, muy suave...

Lo cierto es que finalmente extraño mucho a mi madre quien es la que convierte los días es especiales y únicos, es ella quien da sentido a los días, es los buenos días más hermosos que he recibido desde pequeña, ella está de atenciones pero no deja de atender a quien esté en casa, lo mejor es que todo lo hace con amor y aprecio, es en definitiva el sentido de vivir allá en mi tierra natal, siempre la recuerdo, primera vez que nos separamos por tanto tiempo, ya van 15 meses sin vernos, pero este año es una de mis prioridades, reencontrarme con ella y poder vivir nuevamente esos días perfectos en mi vida.

Amo mucho mis raíces, mi calor guariqueño y mi vida junto a querida vieja, ahora después de hace echo este reencuentro mental y escrito, me siento muy animada de continuar en este día, con las mejores energías y actitudes.

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Fotos de mi autoría.

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