El otro día visitamos este lugar natural lleno de energía positiva y de sensaciones maravillosas, como me está sucediendo estas vacaciones de forma muy común estoy conociendo lugares que tras décadas viviendo aquí no había visitado ni conocido y que en dos meses de turismo estoy descubriendo para mi sorpresa.
Es muy curioso cómo nos tomamos los periodos vacacionales y cuales son nuestras metas y necesidades, simplemente tienes unas expectativas cuando planeas y después las necesidades son bien distintas, solo quiero estar con mi familia, exprimirlos como si nos fuera a ver más en la vida y aprovechar cada segundo con ellos, no me separo de mi hija ni de mi madre y el resto de necesidades quedan en tan segundo plano que ni las recuerdos, ¿Quién podría imaginar que estos paseos me podrían llenar plenamente? Seguramente nadie, pero así está siendo, cada paseo con ellos me devuelve vitalidad.
En mi próximo post si el tiempo me lo permite les mostraré cositas de mi Navidad en Colombia típicas, las velitas, la Nochebuena, las luces navideñas, la Nochevieja, tantas vivencias que no quiero dejar atrás.