El reto de esta semana de #contra-reloj es sobre las Bellas Artes: Escultura, Danzas y Pintura entre otras. En esta ocasión no voy a recurrir al internet para presentarles una bonita representación de estas artes. Espero que sea de su agrado.
Mi abuelo paterno Ramón Peña, que es un artista y le gusta mucho pintar, tallar y hacer manualidades, un buen día le hizo un regalo a mi otro abuelo materno Diógenes Fermín, quien era nativo de Playa grande, Estado Sucre, a él le gustaban mucho los peñeros y tenía gratos recuerdos de su juventud, ya que nació y se crió en un pueblo pesquero. Trabajando desde pequeño en la construcción de peñeros de su padre, es decir mi tatarabuelo.
El mencionado regalo fue un cuadro de unos hermosos peñeros en la orilla de la playa. Está hecho con la técnica de Óleo sobre una tela, con la combinación de pinceles y espátula para la aplicación de la pintura. Mi abuelo para pintar este cuadro se guió observando una foto que tomamos en unas vacaciones cuando fuimos a la playa.
Para lograr el efecto de las nubes se usó la espátula y una degradación del color blanco y el azul, esta es una técnica que demanda destrezas por parte del artista que solo la experiencia de los años puede dar.
Los peñeros que se observan en la orilla de la playa son de color azul, blanco, rojo, amarillo, pintandos con mucha paciencia y dedicación, utilizo esos colores para que llamaran la atención en el cuadrado.
A uno de los lados del cuadro se encuentran unas hermosas palmas de coco, pintadas con distintos tonos de verde, para lograr que se vieran lo más real posible.
Sin embargo, la parte más emocionante de este cuadro son las olas del mar, que me recuerdan cuando íbamos a las playas de Sucre a pasar vacaciones con mis dos abuelos y toda la familia.
Esta pintura fue pintada en el año 2012, con mucho cariño, esmero, trabajo, sudor y dedicación, para lograr ese hermoso resultado.
Este cuadro no estará en las salas del Louvre de París, pero está en la sala de mi casa de los Peña Fermín, como un bonito recuerdo de mi abuelo Diógenes y de nuestra unión familiar.
