Entre la luz de la noche y del día, hay un simple color que me hace querer verlo en todo momento. Lo que nace entre ello es lo más emotivo que puedo llegar a ver; aun que, me cuesta mucho debido a que es de madrugada.
Lo que siento; lo que llego a ver y lo que aprecio, es incomparable con lo que pueda llegar a ver después de madrugada, y es el cielo azul. Entre la mañana y la noche, es incomparable como se pueda llegar a ver el color azul durante el día. Pero si me quedase viendo hacia arriba todo el día, no pudiese disfrutar realmente lo que es un color azul y es, el agua.