Divagaciones poéticas
de un futuro incierto que no sé si llegará,
de una vida tranquila o de una tregua tal vez,
un descanso que se anhela y dista de la realidad,
esa que desgasta cada día más y más
a un cuerpo que soporta los abates sin piedad,
la crueldad de un destino que azota sin cesar,
que doblega fuerzas y mata aspiraciones,
que te exige al máximo sin contemplaciones,
poniendo a prueba la existencia misma.
¿Sueños o ilusiones? Tal vez deseos frustrados,
la añoranza de lograr objetivos del pasado,
metas que no se cumplen y logros ya olvidados;
una lucha contracorriente que socava los deseos,
un caudal de situaciones que te arrastra a su merced,
un torrente enardecido lleno de desesperanzas,
agua turbia que enloda y contamina
destruyendo toda semilla que desea germinar,
destrozando todo a su paso, impidiendo igual
la posibilidad de volver a comenzar.
¿Sueños o ilusiones? Pensamientos al vacio,
imágenes del futuro proyectadas al cerebro,
la visión de querer lo que no se tiene,
aspiraciones de poseer lo que se es esquivo,
hologramas futuristas sin fundamentos realistas,
historietas inventadas por una mente creativa,
telenovelas adaptadas a nuestro protagonismo,
invención de una nueva vida alternativa
donde somos lo que queremos ser,
una adaptación de Alicia en el país de las maravillas.
¿Sueños o ilusiones? Una realidad amarga,
esperanza alimentada por la desesperanza,
deseos frustrados que se anhelan alcanzar,
pensamientos vacíos que buscan llenarse;
o simplemente, un escape a la actualidad,
imaginación que vaga dentro de la oscuridad,
acompañada por la inseparable soledad
que alimenta la desidia y la tristeza,
que limita al ser a vivir en la pobreza,
víctima de sus propios pensamientos.
