View full version

El hijo preferido de la madre (Relato corto)


image.png

Fuente

El hijo preferido de la madre

Sus hermanas vieron cuando llegó a casa. La madre lo traía en los brazos. Era tan pequeño que casi le podía entrar en una mano. Su mirada estaba baja, hacia el rostro de él que evidentemente dormía. El padre con un gesto, les dijo a las niñas que guardaran silencio y se quedaran tranquilas. Luego de aquello, se metieron en la habitación con toda una comitiva: amigos, enfermeras y algunas tías, estuvieron con el recién nacido todo el día. Las niñas siguieron jugando, aunque se sintieron un poco excluidas.

:I:0:I:

El niño lloraba mucho y casi ni comía, y la pobre madre ya hasta ojeras tenía. Acostadito en el pecho, el niño se la mantenía y aún así, era poco lo que dormía. Vinieron varios médicos que después que lo veían, dejaban a la pobre madre más triste y afligida. Como un árbol grande, la madre de aquel hijo no se desprendía y como se iba poniendo el niño, la madre también se ponía.

:I:0:I:

Así la madre sin comer, ni bañarse, ni dormir un fantasma parecía y aunque suene injusto decirlo, solo para aquel niño vivía. Las otras hijas, desde lejos, observaban cómo el respirar de aquel niño a la madre sostenía y aunque parecía que cargaba una gran fatiga, desvelada y angustiada pasaba todas las noches frías.

:I:0:I:

Pero llegó el triste día en el que el niño se convirtió en ángel y las manos de la madre quedaron vacías. Al principio sintió que con aquel niño moría, pero tuvo que sacar fuerza de donde no tenía al ver que al ladito de su cama sus hijitas pequeñas seguían. Y es que así como los animales, aunque tenga varias crías, la madre velará primero por aquel que sufra una agonía.

HASTA UNA PRÓXIMA OPORTUNIDAD, AMIGOS