Demanda Cacofónica

Tengo tanto tiempo con triunfos robados. La gente me alienta a que mienta, a que quiera querer a quien alguna vez quise y no, no se puede, no.

Con unos quizás, usando tal vez y acasos, quise cuestionar cada cosa y pretendí prender mi premisa de aprisionarte en mi memoria, solo allí, pero de prisa te fuiste, te fugaste, esfumada infundada de la funda de mis fantasías, partiste.

Bajó a vejarme con su ponzoñosa, la abeja y vieja vestida de viaje, me refiero a su recuerdo, al remordimiento que reprimo cuando suprimo risas y remoquetes que ahora son ruidos de nombres extintos de cariño y vigentes de daño. No estamos.

¿Alguien me entiende? Tal vez no. Tú, impedida, no ves que es mi vejez responsable; no coordina, ni coopera, con coherencia cuando camina y cocina la idea de que estamos separados a cipotazos que no cimentan la cercanía.

Te digo que gago con gimo y gotas de ojos te pienso, te siento, te miento, cuando voy riendo pensando que éramos distintos y distantes. En realidad, fuimos fingiendo delatarnos, fungiendo ficciones de infecciones cuando nos acercábamos uno al otro.

Sé que con ruin ruido regreso a revivir la adrenalina, pero solo revienta la soga que cegaron a tus celos y sembraron en la cien, adentro, en las ideas ideadas por mi mente, tu perenne y posible partida, de huida, y escabullida, de quebrada cuando me quiebro ante mi inminente demente huida.

Otra vez, con sonidos repetidos, al song y tumbado de los timbales de mi cavilación te digo y cuento mi canto con zumba y bongó de verbos que hasta acá llegamos tú y yo, porque soy introvertido y divertido, poco atrevido, pero, sobre todo, cobarde para pedirte perdón y permiso por permitirme expresar mi pesar y pensar por el tiempo que necesito con distancia en esta demanda cacofónica.

Imagen hecha en Canva

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
12 Comments
Ecency