¿Dónde comienza a contarse un cuento?

     Cuando vamos escribir un cuento, lo primero es tener el tema, luego debemos configurar la historia en nuestra mente, ¿cómo será que voy a contar esta historia? Empezamos a divagar sobre eso, y a veces uno se está bañando y mientras nos cae el agua de la ducha estamos pensando en esa historia, hasta que creemos que ya la tenemos concebida en la memoria, en la mente, entonces nos planteamos la historia en tres líneas, lo que llamamos la estructura aristotélica; presentación, nudo o conflicto y desenlace.

     Si yo puedo contarme a mí mismo la historia en esos tres momentos: presentación, nudo y desenlace, estoy listo para escribirla, me siento y la escribo, porque ya yo sé cómo lo comienzo; el comienzo es la presentación, que debe ser muy breve, donde el lector se entera de qué es lo que está pasando y en esa presentación, que es breve, se vislumbra un conflicto, ahí es cuando el lector dice, “ay, aquí va a pasar algo” y después viene el conflicto como tal, es decir, se despiertan las fuerzas que se contraponen, el lector se entera y entra dentro de ese conflicto, ahí el escritor empieza a jugar con eso, o lo llevamos rápido o lo llevas muy lento, de acuerdo a como tú quieras manejar tu historia; luego de eso viene el desenlace, ¿qué es el desenlace?, el fin del conflicto.

     Una vez que termina el conflicto la emoción para el lector decae, ya ahí no hay nada más que decirle; por eso cuando escribimos una historia debemos saber cuál es el final, porque al resolverse el conflicto, la emoción baja, no hay que seguir narrando.

¿Por qué es importante comenzar el cuento con una acción?

     Porque por allí se comienza a marcar el ritmo, con la acción; porque lo importante para el escritor es captar la atención; es decir, agarrar al lector por la solapa, sentarlo y decirle, ¡léeme! La acción es para entusiasmar al lector, por eso nuestro cuento debe comenzar con buen ritmo y ese ritmo debemos mantenerlo ¿cómo? con los otros elementos que van a constituir la composición, esos son; el tono, que es la voz cómo se expresa nuestro personaje; la atmósfera que se crea, y el tiempo en el que estamos contando la historia; tono, tiempo y atmósfera nos va a dar el ritmo de la historia por eso es que los grandes maestros recomiendan que deberíamos comenzar el cuento con una acción para que se abra el ritmo.

La importancia de la reescritura

     Cuando se produce un texto lo primero que nos parece es que está hermosísimo, que está de perla, ¡uy! decimos, está bueno, y entonces lo publicamos, pero resulta que a eso le falta un 20, un 30 % todavía, eso puede tener errores ortográficos, de tiempo, palabras que pueden ser sustituidas por otras, por eso la recomendación es dejar en reposo, volver a leer y reescribir.

¿Por qué al lector se le dejan detalles?

     El que configura un cuento no es solamente el escritor, el escritor hace una historia que se complementa con lo que va imaginando, con lo que le va agregando el lector, y en eso es que tenemos que jugar cuando contamos historias, voy a decir esto aquí, esto otro en el desenlace y así vamos; diré esto en el centro, esto lo voy retardar; eso es lo que nosotros llamamos el plan literario, que nos sirve para ordenar la secuencia de las acciones, para decirnos voy a contar esto aquí, voy a contar esto después, este personaje como yo lo creé no puede entrar aquí porque sería incongruente que lo hiciera, este personaje que es ateo no lo puedo poner hablar bien de Dios porque él no cree en Dios; esas cosas las tenemos nosotros que tener previamente en nuestro imaginario para poder vaciarlo en el papel.

El dato escondido

     Si le decimos al lector lo qué va a suceder, le cortamos la emoción; ya él no tiene por qué seguir leyendo. Si le decimos, mira, tú sabes la historia del rinoceronte que venía persiguiendo al explorador, pero el explorador murió; al decirle que el explorador se murió ya no hay emoción, al saberlo me quita la emoción, entonces lo que se trata es de jugar con el dato escondido. Hay un dato que debemos llevar, esconderlo hasta donde sea posible, para eso se requiere ciertas habilidades.

     Esos datos escondidos los tenemos que saber manejar, porque no puede ser que contamos todo y que el lector no sepa de qué estamos hablando, porque si yo soy un lector y agarro un cuento y no lo entiendo, me están hablando unos personajes que yo no he visto, me están hablando de un dato que no me han dejado como clave, entonces para mí es más cómodo soltar ese cuento y agarrar otro que tenga emoción, que me atrape.

El lector complemente muchas cosas

     El gozo de la lectura es complementar el cuento, complementar las cosas que el escritor no nos ha dicho, como en la obra de Hemingway que deja mucho para el subtexto; recuerden que el subtexto es una cosa que no está dicha pero que va por debajo, es la intención que va por debajo de lo que sí estamos diciendo, entonces en ese subtexto el lector lo va complementando y está demostrado que eso genera una energía al lector, que va descubriendo detalles y se siente partícipe de eso que va adelantando; hay un momento en que el lector adivina el desenlace y dice: “esto va a terminar así” y a veces el escritor es tan bueno que lleva al lector por ese camino y estamos seguros de que eso va a terminar de esa manera y viene un punto de giro, el autor da un vuelco a otro lado y la historia termina de otra manera y así nos sorprendente.

     En el curso de la lectura el lector debe gozar la trama, debe complementar la lectura, reconfigurar el cuento, entonces es una cuestión de habilidades cómo lo vamos a contar, dejándole los datos al lector para que no se convierta en adivino, para que no tenga que estar diciendo, “bueno y de dónde salió esa nave o por qué entró ese personaje al final”, esas cosas hay que evitarlas y eso se hace dándole claves al lector.

     When we are going to write a story, the first thing is to have the theme, then we must configure the story in our mind, how am I going to tell this story? We start rambling about it, and sometimes we are taking a bath and while the water is running in the shower we are thinking about that story, until we believe that we have already conceived it in our memory, in our mind, then we set the story in three lines, what we call the Aristotelian structure; presentation, knot or conflict and denouement.

     If I can tell myself the story in those three moments: presentation, knot and denouement, I am ready to write it, I sit down and write it, because I already know how I start it; the beginning is the presentation, which must be very brief, where the reader learns what is happening and in that presentation, which is brief, a conflict is glimpsed, that's when the reader says, "oh, something is going to happen here" and then comes the conflict as such, that is, the opposing forces are awakened, the reader learns and enters into that conflict, then the writer begins to play with that, either we take it fast or you take it very slow, according to how you want to handle your story; After that comes the denouement, what is the denouement? , the end of the conflict.

     Once the conflict is over, the emotion for the reader drops, there is nothing more to tell him; that's why when we write a story we must know what the end is, because when the conflict is resolved, the emotion drops, we don't have to continue narrating.

Why is it important to begin the story with an action?

     Because that is where the rhythm begins, with the action; because the important thing for the writer is to capture the attention; that is, to grab the reader by the lapel, sit him down and tell him "read me! The action is to excite the reader, so our story must begin with a good rhythm and we must maintain that rhythm, how? with the other elements that will make up the composition, those are: the tone, which is the voice how our character expresses himself; with the atmosphere that is created, and with the time in which we are telling the story; tone, time and atmosphere will give us the rhythm of the story, so the great masters recommend that we should begin the story with an action to open the rhythm.

The importance of rewriting

     When a text is produced, the first thing we think is that it is beautiful, that it is great, wow! we say, it is good, and then we publish it, but it turns out that it still lacks 20, 30%, it may have spelling mistakes, time errors, words that can be replaced by others.

Why do we leave the details to the reader?

     It is not only the writer who configures a story, the writer makes a story that is complemented with what he imagines, with what the reader adds, and that is what we have to play with when we tell stories, I am going to say this here, this in the denouement and so on; I will say this in the middle, this I will delay it; This is what we call the literary plan, which helps us to order the sequence of actions, to tell ourselves I am going to tell this here, I am going to tell this later, this character as I created him cannot enter here because it would be incongruous for him to do so, this character who is an atheist I cannot have him speak well of God because he does not believe in God; we have to have these things previously in our imagination to be able to put them on paper.

The hidden fact

     If we tell the reader what is going to happen, we cut off the excitement; they no longer have to keep reading. If we tell the reader, look, you know the story of the rhinoceros that chased the explorer, but the explorer died; when we tell the reader that the explorer died, there is no more emotion, knowing this takes away the emotion, so what we have to do is play with the hidden information. There is information that we have to carry, hide it as much as possible, for that we need certain skills.

     We have to know how to handle that hidden information, because it cannot be that we tell everything and the reader does not know what we are talking about, because if I am a reader and I take a story and I do not understand it, some characters are talking to me that I have not seen, they are talking to me about information that they have not left me as a key, then for me it is more comfortable to let go of that story and take another one that has emotion, that catches me.

The reader complements many things

     The joy of reading is to complement the story, to complement the things that the writer has not told us, as in Hemingway's work, which leaves a lot for the subtext; remember that the subtext is something that is not said but that goes underneath, it is the intention that goes underneath what we are saying, then in that subtext the reader complements it and it is proven that this generates an energy in the reader, who discovers details and feels part of what is being advanced; there is a moment in which the reader guesses the outcome and says: "this is going to end like this" and sometimes the writer is so good that he takes the reader down that path and we are sure that that is going to end that way and there comes a turning point, the author takes a turn to another side and the story ends in another way and so we are surprised.

     In the course of the reading, the reader must enjoy the plot, must complement the reading, reconfigure the story, so it is a question of skills how we are going to tell it, leaving the reader the data so that he does not become a guesser, so that he does not have to be saying, "well, where did that ship come from or why did that character come in at the end", those things must be avoided and that is done by giving clues to the reader.