Que no me falten tus besos cuando me falte el aliento
que no se cansen tus brazos cuando se canse mi cuerpo
que no me mires con miedo cuando de miedo esté preso.
Que no te broten las lágrimas cuando yo llore por dentro
que no me sueltes te pido cuando tropiece en el tiempo
que no dejes de creerme cuando es mentir lo que intento.
Que no pierdas tú la fe cuando yo grite ¡no puedo!
que no se apague tu risa cuando mis labios estén secos
que no te olvides de mi cuando se extinga el recuerdo.
Que no se apague tu luz cuando se disipe el destello
que no me digas adiós cuando me esté despidiendo
que no te consuma el frío cuando se acerque el invierno.
Habrán pasados los días desde nuestro último encuentro
entonces mirando al cielo sonreirás un momento
en ese preciso instante sentirás más cálido el viento
será mi soplo de vida para decir que te quiero
que más allá hay una vida, aunque ya en esta esté muerto.