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Elisa was a young woman of wealthy parents, Joshua was a man who, on the contrary, was of limited means. Join me and I will tell you this story, with which you may feel identified or that at least invites you to fantasize.

She was self-confident, enjoying the good things in life, meetings, clubs and all the comforts of life. Although her parents had a lot of money, Elisa was an independent woman, thanks to her studies, she managed to obtain a career in administration and accounting, and with it an excellent job in a large company.

Joshua barely managed to finish elementary school, his parents were poor and from a very young age he had to work hard, cleaning cars, shining shoes, cleaning house fronts, mowing neighbors' lawns and helping to pack groceries in supermarkets. For Joshua, life always went by in a hurry, every day was a struggle to help his mother who was taking care of his father who was very ill with cancer, Joshua worked hard to bring home bread. His few moments of fun were running in the rain and counting the stars dreaming, dreaming....

Finally, after years of struggle, Joshua's father passed away when Joshua turned 16, his tired mother left the city in search of a better future, leaving Joshua behind. For him it was nothing new to have to work, his life was very normal, he just did not feel the burden of running a household at a young age. He was always working and when he finally turned 22 he was hired as Valet Parking in the company where Elisa worked. He finally had a stable job that made him feel better, which helped him rent a house and improve his quality of life.

For both Elisa and Joshua there was never time for love.

Every day Elisa would arrive at the parking lot and Joshua would greet her with a smile and a good morning, to which Elisa often did not respond, always worried, thinking about her chores at the company and carrying a pile of folders. There was an abysmal distance between them.

Elisa era una joven de padres adinerados, Joshua era un hombre que por el contrario era de escasos recursos. Acompáñame y te cuento esta historia, con la que tal vez te sientas identificado o que al menos te invita a fantasear.

Ella, segura de sí misma gozando de las bondades de la vida, reuniones, clubs y todas las comodidades. A pesar que sus padres tenían mucho dinero Elisa era una mujer independiente, gracias a sus estudios, logró obtener una carrera de administracion y contaduría, con ello un excelente empleo en una gran empresa.

Joshua a duras penas alcanzó terminar la educación primaria, sus padres eran de escasos recursos y desde muy chico tuvo que trabajar duro, limpiaba carros, limpiaba zapatos, limpiaba frentes de viviendas, podaba el cesped de los vecinos y ayudaba en los supermercados a embalar las compras. Para Joshua la vida siempre transcurría muy a prisa, cada día era una lucha por ayudar a su mamá quien cuidaba de su padre muy enfermo de cancer, Joshua trabajaba duro para llevar pan a su hogar. Los escasos momentos de diversión de él eran correr bajo la lluvia y contar las estrellas soñando, soñando...

Finalmente tras una lucha por años, el padre de Joshua fallece cuando este cumplió 16 años, su madre cansada, abandona la ciudad en busca de un mejor porvenir, dejando a Joshua atrás. Para él no era nada nuevo tener que trabajar, su vida transcurrió muy normal solo que ya no sentía el peso de llevar un hogar a temprana edad. Siempre estuvo trabajando y cuando al fín cumplió 22 años fue contratado como Valet Parking en la empresa donde trabajaba Elisa. Al fin tenía un trabajo estable y que lo hacía sentir mejor, eso lo ayudó en el alquiler de una vivienda y mejorar su calidad de vida.

Tanto para Elisa como para Joshua nunca hubo tiempo para el amor.

Todos los días Elisa llegaba al estacionamiento y Joshua la recibía con una sonrisa y un buenos días, del que muchas veces Elisa no respondía, siempre preocupada, pensando en sus quehaceres en la empresa y cargado un montón de carpetas. Entre ambos había una distancia abismal.

Elisa's parents, seeing that she was reaching a very adult age, decided her future and without the right to object, they presented her with her future husband, of whom she did not have the slightest feeling, neither did he, it was a marriage arranged for convenience.

Elisa had no choice but to accept her parents' wish, thinking that love would come later or that it was not necessary. Their wedding was wonderful, many luxuries and elegance, Elisa deep down felt empty but kept thinking that everything would come later, without imagining that she would begin to live a lot of unhappiness.

After an arranged marriage, neither of them could stand each other, her husband was very conflictive, he argued about everything, he was nonconformist, he was a very cold and calculating person, to the point that Elisa took refuge even more in her work and extended her working hours in order to be as little as possible close to her husband. Immersed in so many problems, she remained blind to happiness and the knowledge that she could put an end to everything at any moment, instead she decided to live this via crusis for a long time.

Meanwhile, Joshua greeted her from Monday to Saturday with a big smile and a good morning without her even noticing. To Joshua Elisa seemed a very attractive woman but he was aware that she would never notice him because she was not of his social status, but that did not take away the politeness, good manners that he learned on the street by dint of work. Elisa lived ignoring him, not because she considered him inferior, but because she was distracted and busy.

But the universe conspires and conspires...

After a while Elisa lived full of sadness, she realized that her marriage without love was going nowhere, without intimacy, without details or moments, every day an empty person was waiting for her, if he wasn't busy with his work, club and business appointments, he lived glued to the phone, in addition to this he was unfaithful and Elisa knew it.

One day Elisa gets up from her bed and goes straight to the bathroom, her husband gets up and goes to her and they have the first morning discussion, he complaining about superfluous things like who will pay the bills, discussion that in the end that man gives offenses against her self-esteem making it clear that he has a lover and that he is better than her. Elisa sees her failure head on, but she never thought that she was not really guilty of anything, just letting her parents choose for her. As a result, she moves further away from them so as not to have to face them. When she finally arrives at the parking lot, Joshua greets her and notices her tears, clears his throat and says good morning with a smile that was more of a grimace of discomfort than a smile.

Elisa doesn't answer, she dries her tears, takes her folders and hands the keys of her car to Joshua, for the first time she looked up and they both stared at each other without saying anything, they didn't need to say a word because their souls communicated directly.

Los padres de Elisa, al ver que estaba llegando a una edad muy adulta, deciden el futuro de ella y sin derecho a objetar, le presentan su futuro esposo, del cual ella no tenía ni el más mínimo sentimiento, él tampoco, era un matrimonio arreglado por conveniencia.

Elisa no le quedó más remedio que aceptar el deseo de sus padres pensando que el amor, llegará después o que este no era necesario. Su boda fue maravillosa, muchos lujos y elegancia, elisa en el fondo se sentía vacía pero seguía pensando que todo llegará después, sin imaginar que comenzaría a vivir mucha infelicidad.

Tras un matrimonio arreglado ninguno de los dos se soportaban, su esposo era muy conflictivo, de todo estaba discutiendo de todo era inconforme, era una persona muy fría y calculadora, llegando al extremo que Elisa se refugiara aún más en su trabajo y extendiera apropósitamente sus horas laborales con tal de estar lo menos posible cerca de su marido. Sumergida en tantos problemas ella seguía ciega ante la felicidad y el conocimiento que ella podía poner fin a todo en cualquier momento, en cambio decidió vivir ese via crusis por largo tiempo.

Mientras tanto, Joshua la recibía de lunes a sábado con una gran sonrisa y un buenos días sin que ella siquiera lo estuviera notando. Para Joshua Elisa le parecía una mujer muy atractiva pero era conciente que ella jamás se fijaría en él por no ser de su estatus social, pero eso no le quitaba lo cortéz, buenos modales que aprendió en la misma calle a fuerza de trabajo. Elisa vivía ignorándolo pero no por que lo considera inferior sino por distraída y ocupada.

Pero el universo conspira y conspira...

Llegado un tiempo Elisa vivía llena de tristezas, se dio cuenta que su matrimonio sin amor no llegaba a ningun lado, sin intimidad, sin detalles ni momentos, cada día la esperaba una persona vacía que si no vivía metido en su trabajo, club y citas de negocios, vivía pegado al teléfono, adicional a esto él le era infiel y Elisa lo sabía.

Cierto día Elisa se levanta de su cama y va directo al baño, su marido se levanta y se dirige a ella y tienen la primera discusión mañanera, él reclamándo cosas superfluas como quién pagará las cuentas, discusión que al final aquel hombre propina ofenzas contra su autestima dejándole claro que tiene una amante y que es mejor que ella. Elisa ve de frente su fracaso, pero nunca pensó bien que en realidad no era culpable de nada, tan solo dejar que sus padres eligieran por ella. A consecuencia se aleja aun más de sus ellos para no tener que enfrentarlos. Agobiada no puede evitar llorar camino al trabajo, cuando al fin llega al estacionamiento Joshua la recibe y nota sus lágrimas, carraspeó su garganta y le da los buenos días con una sonrisa que más bien de sonrisa era una horrenda mueca de incomodidad.

Elisa no responde, ella seca sus lárimas, toma sus carpetas y entrega las llaves de su vehículo a Joshua, por primera vez levantó la mirada y ambos se miraron fijamente sin decir nada, no necesitaron emitir palabra alguna pues sus almas se comunicaron directamente.

Jhosua felt something inside, a feeling that he could not explain, since then he wished every day the moment she would arrive and see her, so she without any expression but sadness handed over her keys.

Elisa, feeling destroyed, was shipwrecked in the deep waters of depression and on her way to work she stopped at the supermarket and bought a bottle of wine. She left it in sight, when Joshua parked her car the same day, she noticed the bottle and her first thought was that she would be celebrating, but, seeing her so sad, noticing her change, she no longer looked like the confident person she was, although Elisa did not utter words when she saw him, her look could tell him many things. He became worried and decided that when it was her turn to leave to pick up her car, he would approach her, but since he had almost never responded to her good morning, he hesitated many times.

It is departure time and Elisa waits for the delivery of her vehicle, Joshua hesitated many times asking for the appropriate words in his mouth to comfort Elisa, but they were not necessary, their communication between the two of them was through the soul, Joshua gets out of the vehicle, helps her very affectionately with his folders, opens the door very delicately and as an impulse takes her by the back at waist level while she sits down. The parking lot was witnessing a magical moment.

Elisa takes the wheel, she could feel Joshua's touch, took a deep breath and couldn't help but collapse on top of him. Joshua perplexed, not knowing what to do, looks around, no one else sees them, opens the car door again and just says: - Miss.

She gets out of the car trying to breathe and throws herself into Joshua's arms, tired of everything, without stopping crying. Joshua just hugs her, caressing her back until she can calm down, while deep inside he wishes she wouldn't stop hugging him, between sobs Elisa calms down without stopping hugging him and without noticing she responds to Joshua's affectionate caresses and both are comforted.

Without realizing it, the night falls over them and the parking lot lights turn on and it starts to drizzle, Joshua's shift ended more than two hours ago...

To be continued...

Jhosua sintió algo por dentro, un sentimiento que no pudo explicar, desde entonces deseaba todos los días el momento que ella llegara y verla, así ella sin expresión alguna más que tristeza entregaba sus llaves.

Elisa, se sentía destruída, naufragó en las aguas profundas de la depresión y camino al trabajo se detuvo en al supermercado y compró una botella de vino. La dejó a la vista, cuando Joshua el mismo día le estacionó el carro, nota la botella y su primer pensamiento fue que estaría de celebración, pero, verla tan triste, notar su cambio, dejó de verse como la persona segura de sí misma, aunque Elisa no emitía palabras al verlo, su mirada podía decirle a él muchas cosas. Se preocupó y decidió que cuando fuera el turno de salida en la que ella recogiera su vehículo, él la abordaría, pero como casi nunca le había respondido a sus buens días titubeó muchas veces.

Es la hora de salida y Elisa espera por la entrega de su vehículo, Joshua resó muchas veces pidiendo las palabras apropiadas en su boca para consolar a Elisa, pero no fueron necesarias, su comunicación entre ellos dos era a través del alma, Joshua sale del vehículo, la ayuda muy cariñosamente con sus carpetas, abre la puerta muy delicadamente y como un impulso la toma por la espalda a la altura de la cintura mientras ella se sienta. El estacionamiento estaba siendo testigo de un mágico momento.

Elisa toma el volante, pudo sentir el toque de Joshua, respiró profundo y no pudo evitar desplomarse sobre él. Joshua perplejo, sin saber qué hacer, observa a todos lados, nadie más los ve, abre la puerta del vehículo nuevamente y tan solo dice: - Señorita.

Ella confundida sin emitir palabra alguna, sale del vehículo tratando de respirar y se lanza a los brazos de Joshua cansada de todo, sin parar de llorar. Joshua tan solo la abraza acariciando su espalda hasta esperar que ella pueda calmarse, mientras en el fondo desea que no lo deje de abrazar, entre sollozos Elisa se va calmando sin dejar de abrazarlo y sin darse cuenta responde a las caricias de cariño de Joshua y ambos se reconfortan.

Sin darse cuenta la noche cae sobre ellos y las luces del estacionamiento se encienden y comienza a lloviznar, el turno de Joshua culminó hace más de dos horas...