Un saludo cordial a toda esta hermosa comunidad "Ladies of Hive", un lugar para compartir experiencias y mucho más.
Como mujeres, es natural que tengamos siempre mucho que contar, porque somos capaces de expresar lo que pensamos y lo que sentimos.
Estoy muy contenta de participar en la edición 101 del concurso comunitario, e invito a unirse a mi amiga @sacra97.
Hablemos de una mujer resiliente, puede ser tu amiga, familiar, compañera de trabajo, etc. ¿Cuál es su reto en la vida y qué hizo para superar la prueba a la que se enfrentó?
Son muchas las mujeres resilientes que conozco, creo que la mayoría de las que son cercanas a mí, son mujeres fuertes y empoderadas, capaces de levantarse tantas veces sea necesario.
Fue difícil para mí decidirme, pero al final elegí narrar la historia de una colega, para la que usaré el nombre de María.
La fortaleza de María
María siempre está sonriente, su cabellera larga y negra, entaconada aún siendo una mujer alta, luciendo siempre elegante.
Cada día la veía en la oficina (ya no trabajamos juntas) sin escuchar nunca una queja, era muy agradable compartir tiempo con ella.
Nos tocó trabajar en equipo, por largas horas compartimos el mismo espacio y entonces supe lo que ella callaba.
Su esposo le había sido infiel y había tenido una hija con otra mujer, al mismo tiempo que ella, es decir, su hija tenía una hermana de su misma edad.
¿Cómo lo superó?
La admiro, porque yo, de sólo pensarlo, se me derrumba el mundo.
María me contó que ella estaba clara en lo que quería, ella lo amaba, así que su primera reacción no fue, como hubiera sido la mía: ¡Dejarlo! NO. Ella más bien necesitaba saber qué quería él y sin mucho drama le dijo ¿Qué quieres hacer con tu vida? Lo que decidas lo respetaré, pero debes estar seguro, así que piénsalo.
Él, sin pensarlo, le dijo que la quería a ella y pactaron continuar su matrimonio, en medio de todo lo que implicaba por lo que estaba aconteciendo.
Como paso siguiente decidió confiar en él (más difícil todavía), enfrentó el momento en que tuvo que hablar con "la otra", que por supuesto no estaba conforme con el hecho de que él no se quedara con ella.
No fue fácil, me dijo, pero apostaba a mi hogar, él era el padre de mi hija y el hombre que quería a mi lado, además, él había elegido quedarse conmigo, yo no lo estaba atando, eso tenía valor para mí y a todo eso me aferré.
Pasaron los años, ya su hija tenía 6, la crisis había pasado y ella seguía siendo la esposa perfecta. El tipo de mujer que confieso que no soy, de las que hace todo en el hogar, aún cuando ambos tienen el mismo horario laboral.
Lo que le inquietaba entonces, era el hecho de que cuando su suegra iba a la ciudad donde ella vivía durante un fin de semana, pasaba un día con ella y el otro día, con la mamá de su otra nieta, como si tuvieran el mismo lugar.
Pienso que es algo complejo, ambas tienen el mismo parentesco con esa señora, sin importar el origen; pero entiendo perfectamente su punto, "la otra" también había pasado a ser parte de la familia y debía vivir con ello.
Luego, pasó la página y siguió adelante, al menos eso parecía. Todo esto lo vivió serena, sin gritos y sin incluir a otros.
¿Por qué elijo esta historia?
Por la manera como ella afrontó todo ese proceso, aún siendo mucho menor que yo, pienso que fue muy madura. Fue capaz de ver las cosas objetivamente, aún cuando tenía el corazón roto.
En historias similares, lo más natural es que las mujeres hagamos un berrinche del tamaño del cielo, hasta la ropa de ese ser puede salir volando por la ventana, si acaso no es quemada antes. El hombre va patitas a la calle y después de meses de drama, en lo que los insultos de todo tipo van y vienen, finalmente ella decide perdonarlo y se les ve juntos como si nada y si alguno de nosotros tuvo la imprudencia de apoyarla, odiándolo a él, entonces dejamos de ser parte de los afectos de esa casa.
Ella fue objetiva y no fue tampoco, la mujer que imploró por amor. Pudo saber lo que quería desde el principio, cuando muchas de nosotras estaríamos ciegas, sangrando por la herida. Creo que eso tiene su valor.
Mujeres... sentimientos e historias
Gracias a todos ustedes por tanto...
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