We are all cooks, the word is the main ingredient of your most precious dish. With what is said and displayed we can invite the universe to dance, sowing the seed of joy and hope, with the word we can also make walls; spread hate and fear. This is the power, this power is yours. Therefore, every manifestation becomes the dish you are preparing and this is what defines what kind of cook we choose to be. For many years it has been taught that the word has power. Each one of them has an idea. Thousands of cultures around the world teach lessons about the care we should take with the word.
In Christianity it is said that words can reveal what each of us has in our hearts. Words are the exact measure of the level of consciousness of the one who expresses them.
There is a story, where a teacher to correct a student who slandered another student, asked him to write the words he would use to offend his classmate, to write it down on a piece of paper. The teacher then told him to tear the paper into many pieces and release the remains into the air, outside the school, where the strong breeze manifested itself, then told him to pick up each piece again. ''That's impossible," replied the student, knowing that he did not know where the pieces were scattered and almost lost. ''This is what happens with our words," said the teacher, "after we have said them, they no longer belong to us and we do not know what their fate will be. The professor concluded.
I want to leave you with some advice that may help you understand the power of these words, personal advice that I learned during my lifetime and that I want to share so that we can see things more clearly.
You have to pay a lot of attention before you speak, you have to listen to all the parties involved, there are two versions within this discussion, which go beyond the truth.
You must weigh the feelings that move you: Envy, revenge, jealousy, hate, love and peace.
We must be careful not to disguise the desire for revenge with the disguise of justice. Usually under the false pretext of an act that seems noble, we tend to hide and let go of our dark feelings. This is a mistake.
You have to be objective and clear with your words. No is no; yes is yes. You must know how to explain your way of thinking with serenity and respecting the opinion of others that is contrary to yours. You must not forget that good seed is never lost and that at the right moment it always germinates.
You must be the reflection of the wise words that you are going to use, if they are not mirrors of the attitudes of the one who says them, they fall into an abyss and these disappear.
We must always be sincere and should not pretend any affection; but, remember always that the most powerful force that exists is love, it is the raw material of all miracles in this universe. The word is light before the eyes of the blind.
The universe is a living being, which is eternal in transformation and it reacts to the exact measure of our actions. The noblest way to know how to commune with the universe is always to share the joy of all beings on earth. The word is that powerful and very low cost seed.
Wisdom is the color we give to the philosophy of the various traditions. Just recognizing the tree by its fruit is the beautiful image that is drawn with these same colors. You are the tree, the words are the fruits, as well as the attitudes. You decide if you want to pollute or feed, with your spiritual dinners, with the power you have to give a message. You're the definition of every word and every act.
Todos somos cocineros, la palabra es el ingrediente principal de su plato más preciado. Con lo que se dice y se muestra podemos invitar al universo a bailar, sembrando la semilla de la alegría y la esperanza, con la palabra también podemos hacer muros; esparcir el odio y el miedo. Este es el poder, este poder es tuyo. Por lo tanto, cada manifestación se convierte en el plato que estás preparando y esto es lo que define qué tipo de cocinero elegimos ser. Durante muchos años se ha enseñado que la palabra tiene poder. Cada uno de ellos tiene una idea. Miles de culturas de todo el mundo enseñan lecciones sobre el cuidado que debemos tener con la palabra.
En el cristianismo se dice que las palabras pueden revelar lo que cada uno de nosotros tiene en su corazón. Las palabras son la medida exacta del nivel de conciencia de quien las expresa.
Hay una historia, en la que un profesor para corregir a un estudiante que calumniaba a otro estudiante, le pidió que escribiera las palabras que usaría para ofender a su compañero de clase, para escribirlo en un papel. El maestro le dijo entonces que rompiera el papel en muchos pedazos y que soltara los restos en el aire, fuera de la escuela, donde se manifestaba la fuerte brisa, y luego le dijo que recogiera cada pedazo de nuevo. "Eso es imposible", respondió el estudiante, sabiendo que no sabía dónde estaban dispersos los pedazos y casi perdidos. "Esto es lo que sucede con nuestras palabras", dijo el profesor, "después de haberlas dicho, ya no nos pertenecen y no sabemos cuál será su destino". Concluyó el profesor.
Quiero dejarles con algunos consejos que pueden ayudarles a entender el poder de estas palabras, consejos personales que aprendí durante mi vida y que quiero compartir para que podamos ver las cosas más claramente.
Hay que prestar mucha atención antes de hablar, hay que escuchar a todas las partes involucradas, hay dos versiones dentro de esta discusión, que van más allá de la verdad.
Debes sopesar los sentimientos que te conmueven: Envidia, venganza, celos, odio, amor y paz.
Debemos tener cuidado de no disfrazar el deseo de venganza con el disfraz de la justicia. Normalmente, con el falso pretexto de un acto que parece noble, tendemos a esconder y dejar ir nuestros oscuros sentimientos. Esto es un error.
Tienes que ser objetivo y claro con tus palabras. No es no; sí es sí. Debes saber explicar tu forma de pensar con serenidad y respetando la opinión de los demás que es contraria a la tuya. No debes olvidar que la buena semilla nunca se pierde y que en el momento justo siempre germina.
Debes ser el reflejo de las sabias palabras que vayas a utilizar, si no son espejos de actitudes de aquel que las dice, se caen a un abismo y estas desaparecen.
Debemos ser siempre sinceros y no fingir ningún afecto; pero, recordad siempre que la fuerza más poderosa que existe es el amor, es la materia prima de todos los milagros de este universo. La palabra es luz ante los ojos de los ciegos.
El universo es un ser vivo, que es eterno en la transformación y este reacciona a la medida exacta de nuestras acciones. La manera más noble de saber comulgar con el universo es siempre compartiendo la alegría a todos los seres de la tierra. La palabra es esa semilla de gran alcance y muy bajo costo.
La sabiduría es el color que le damos a la filosofía de las diversas tradiciones. El simple hecho de reconocer el árbol por su fruto es la hermosa imagen que se dibuja con estos mismos colores. Tú eres el árbol, las palabras son los frutos, así como las actitudes. Tú decides si quieres contaminar o alimentar, con tus cenas espirituales, con el poder que tienes de dar un mensaje. Tu eres la definición de cada palabra y cada acto.
Remember, words have power. Blessings to you and yours.
Recuerda, las palabras tienen poder. Bendiciones para ti y los tuyos.
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