The worst prisons are those without bars. The fantasy of freedom is the most terrible of all the prisons because it does not let us be aware of the margins of our options, since it does not perceive that the barriers are becoming narrower and, contrary to what it seems, it barely limits the size and pales the colors of the world. Free thought, autonomy of ideas, space to accept what is different requires effort, boldness and courage, rare commodities on the shelves of hearts and minds.
The world has always encountered strange voices and dissonant attitudes that interfere with the management, control and business of those who think that others are there to serve and not to share. Those who do not fit in are relegated to the margins of the world.
I do not cite here those who confuse courage with violence, or those who walk the paths of crime out of ignorance or cowardice. I am referring to the wisest and bravest men in history, those who took away the sleep of the rulers without striking a blow or even uttering an aggressive word. Jesus was the best example, however we have others more contemporary like Martin Luther King. Mahatma Gandhi brought the mighty British Empire to its knees using as weapons the wisdom to think differently, the audacity to disobey, concomitant with love to walk the path of nonviolence. He took the crowds with him, because he touched their hearts and minds. It gave color to their souls.
The social coexistence creates the false sensation that to be accepted it is necessary to belong to some tribe, since, besides being comfortable, it facilitates the control of the administration when framing it in pre-established models and with defined limits. A clan is chosen and a kind of adhesion contract is made, tacit and unconscious, like those prepared for telephone or cable television operators, accepting the concepts and preconceptions, preconceived and canned ideas, defining what is right and what is wrong, what is allowed and what is forbidden. They dress like them, use their own vocabulary and frequent the same places.
You even think you are happy and have found your place. A process of standardization, homogenization and, worst of all, pasteurization. You give up your best to be accepted without problems in the group and you feel happy. In this way you renounce yourself. Do you remember Faust? Well, keeping the right proportions is exactly this. You give up freedom of thought in exchange for acceptance and pseudo happiness. The administration appreciates this.
Free people think globally, are supportive, ethical and know that each of us is unique. There is no one like you. There is beauty within each of us, even outside of us, each in their own way, like different pieces that form a wonderful marble mosaic.
The eagerness of each day with its many novelties makes you forget the new. What is truly new is what is in fact different and is capable of provoking structural transformations and not just apparent changes in the novelties.
In reality, history shows us that it was those who believed that everything could be different and better, who stood up to the administration - in the end, the administration does not like to be bothered - and transformed the world, because they were the living example of change. They used their own lives as raw material for a major work of art, and broke down the walls of the status quo, moving the world forward. These people make a difference because they dare to think differently. They become heroes simply by not accepting secondary roles, rejecting the limits imposed on them, cutting the ties that prevent them from flying. Sometimes we are like the caterpillar that is dazzled by the beauty and flight of the butterfly without knowing that we also have wings.
Isn't it time to rethink all your concepts and ideas? Become the protagonist of your own life? You have this power. An insurrection in your way of thinking, a careful analysis of what is in fact yours and of what was imposed on you without you perceiving it. Reflect mainly on what makes you act as an automaton and think if it really makes sense. Reflect if, from the bottom of your heart, you agree with those ideas or simply follow them for pure comfort or for fear of social rejection.
A good trick is to perceive if your way of thinking and acting brings pain and suffering to others. If so, it's time to change. Sowing joy wherever you go is a smart way to have it within us. During that process you will get to know yourself better and, despite the flowers and thorns you will find along the way, you will see that it is wonderful. In the end you are your own best company. Don't be surprised if people start seeing a strange glow in your eyes, it's pure light!
Be the hero of your own revolution, of the transformation of your soul. The only way to change the world is to change yourself.
Las peores cárceles son las que no tienen barrotes. La fantasía de libertad es la más terrible de todas las prisiones porque no nos deja ser conscientes de los márgenes de nuestras opciones, ya que no percibe que las barreras son cada vez más estrechas y, contrariamente a lo que parece, apenas limita el tamaño y palidece los colores del mundo. El libre pensamiento, la autonomía de las ideas, el espacio para aceptar lo que es diferente exige esfuerzo, audacia y coraje, mercancías raras en los estantes de los corazones y las mentes.
El mundo siempre ha encontrado voces extrañas y actitudes disonantes que interfieren en la gestión, el control y los negocios de quienes piensan que los demás están para servir y no para compartir. Aquellos que no encajan son relegados al margen del mundo.
No cito aquí a los que confunden el coraje con la violencia, o a los que caminan por los senderos del crimen por ignorancia o cobardía. Me refiero a los hombres más sabios y valientes de la historia, aquellos que quitaron el sueño a los gobernantes sin dar un golpe o incluso pronunciar una palabra agresiva. Jesús fue el mejor ejemplo, sin embargo tenemos otros más contemporáneos como Martin Luther King. Mahatma Gandhi puso de rodillas al poderoso Imperio Británico usando como armas la sabiduría para pensar de forma diferente, la audacia para desobedecer, concomitante con el amor para caminar por el camino de la no violencia. Se llevó a las multitudes, porque tocó sus corazones y mentes. Le dio color a sus almas.
La convivencia social crea la falsa sensación de que para ser aceptado es necesario pertenecer a alguna tribu, ya que, además de ser cómodo, facilita el control de la administración al enmarcarlo en modelos preestablecidos y con límites definidos. Se elige un clan y se hace una especie de contrato de adhesión, tácito e inconsciente, como los que vienen preparados para los operadores de telefonía o de televisión por cable, aceptando los conceptos y preconceptos, ideas preconcebidas y enlatadas, definiendo lo que está bien y lo que está mal, lo que está permitido y lo que está prohibido. Se visten como ellos, usan su propio vocabulario y frecuentan los mismos lugares.
Incluso piensas que eres feliz y que has encontrado tu lugar. Un proceso de estandarización, homogeneización y, lo peor de todo, pasteurización. Renuncias a lo mejor de ti para ser aceptado sin problemas en el grupo y te sientes feliz. De esta manera renuncias a ti mismo. ¿Te acuerdas de Fausto? Bueno, mantener las proporciones correctas es exactamente esto. Renuncias a la libertad de pensamiento a cambio de la aceptación y la pseudofelicidad. La administración aprecia esto.
Las personas libres piensan globalmente, son solidarios, émpatico y saben que cada uno de nosotro es único. No existe nadie como tú. Hay belleza dentro de cada uno de nosotros, incluso fuera de nosotros, cada uno a su manera, como distintas piezas que forman un maravilloso mosaico de marmol.
El afán de cada día con sus múltiples novedades te hace olvidar lo nuevo. Lo que es verdaderamente nuevo es lo que de hecho es diferente y es capaz de provocar transformaciones estructurales y no sólo cambios aparentes en las novedades.
En realidad, la historia nos muestra que fueron los que creyeron que todo podía ser diferente y mejor, los que se pusieron en la cara -al final, a la administración no le gusta que la molesten- y transformaron el mundo, porque fueron el ejemplo vivo del cambio. Utilizaron sus propias vidas como materia prima para una obra de arte mayor, y rompieron los muros del statu quo, haciendo avanzar al mundo. Estas personas marcan la diferencia porque se atreven a pensar de forma diferente. Se convierten en héroes por el simple hecho de no aceptar papeles secundarios, rechazar los límites que se les imponen, cortar los lazos que les impiden volar. A veces somos como la oruga que se deslumbra por la belleza y el vuelo de la mariposa sin saber que también tenemos alas.
¿No es hora de repensar todos tus conceptos e ideas? ¿Convertirse en el protagonista de su propia vida? Tienes este poder. Una insurrección en tu forma de pensar, un análisis cuidadoso de lo que es de hecho tuyo y de lo que te fue impuesto sin que lo percibas. Reflexiona principalmente sobre lo que te hace actuar como autómata y piensa si realmente tiene sentido. Reflexione si, desde el fondo de su corazón, está de acuerdo con esas ideas o simplemente las sigue por puro confort o por miedo al rechazo social.
Un buen truco es percibir si tu forma de pensar y actuar trae dolor y sufrimiento a los demás. Si es así, es hora de cambiar. Sembrar alegría dondequiera que vayas es una forma inteligente de tenerla dentro de nosotros. Durante ese proceso te conocerás mejor a ti mismo y, a pesar de las flores y espinas que encontrarás en el camino, verás que es maravilloso. Al final eres tu mejor compañía. No te sorprendas si la gente empieza a ver un extraño brillo en tus ojos. ¡Es luz pura!
Sé el héroe de tu propia revolución, de la transformación de tu alma. La única manera de cambiar el mundo es cambiarse a sí mismo.
Translation made with the free version of the translator DeepL
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The first image was edited with the program PhotoScape.
Traducción realizada con la versión gratuita del traductor DeepL
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La primera imagen fue editada con el programa PhotoScape.
