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Concurso de literatura La Abeja Obrera | EL PEZ POR @MAYIFIESTAS.
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Para Marcelo un joven de bellos sentimientos todos los días transcurrían iguales, levantarse, trabajar y regresar a la casa donde le aguardaba su esposa María, una mujer amargada, de mal genio, a la que nada en absoluto le agradaba.
Marcelo pudo sentir que algo cambiaría, al llegar a casa, María comenzó sus acostumbradas quejas, " que el dinero no alcanza, que porque me case contigo si eras pobre", Marcelo aguantaba en silencio todas esas humillaciones.
Esa tarde salió de la casa dirigiéndose al mar con su caña de pescar, las horas pasaron y no pescaba nada, pensaba que al menos había logrado calmarse, y ya cuando estuvo a punto de retirarse, pudo notar a su lado un pez muy hermoso, y sin saber porqué le habló: "Hola hermosa criatura, por favor no te acerques a mi caña, no quiero pescarte, solo hazme compañía" este mágicamente se quedó allí mirándolo fijamente, escuchando lo infeliz que era, y como su mujer lo humillaba a diario.
Al día siguiente Marcelo contaba las horas para terminar su jornada de trabajo e ir al encuentro de su amigo el pez, con el que se sentía feliz, salió de casa sin escuchar siquiera a su mujer, corrió al mar a encontrarse con él, pero está vez mientras le hablaba, escuchó una voz decirle: " No soy amigo, soy una amiga" sorprendido pero no asustado sonrió.
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Estuvieron conversando por horas sin percatarse del tiempo.
Los años pasaron y Marcelo cumplía con su rutina diaria, sentía que con el pez podía ser él, podía hablar de su amor por la poesía, de su sueño de viajar en un velero para encontrar a una sirena y recorrer el océano, de a poco le fue contando sus sueños, llegó a abrir su alma con ella, sentía que la amaba, no lo podía entender, pero quería tomarla en sus brazos y besarla.
De pronto aquel grito lo hizo volver a la realidad, era María, gritando, peleaba por la ausencia de su marido en el hogar, discutieron, fue todo un caos, María descubrió lo del pez y lo miró con odio.
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Al día siguiente Marcelo regresaba del trabajo y tuvo que correr al mar, al ver a su mujer que con un cuchillo, iba dispuesta a acabar con el pez, Marcelo y María se enfrentaron en una lucha feroz para salvar a su amada amiga, logrando ella herirlo de muerte, cayendo tendido en el mar, mientras María corría asustada tropezó golpeándose la cabeza con una piedra y muriendo instantáneamente.
Marcelo que yacía en el mar fue recibido por su amiga, solo que está vez ya no era un pez se había convertido en una hermosa mujer, quien lo abrazo, y recibió diciéndole "Marcelo amor mío bienvenido, aquí serás feliz" ella lo tomó de la mano, sumergiéndose ambos al fondo del mar convirtiéndose en los más hermosos peces, fue allí donde Marcelo encontró la felicidad, pudiendo recorrer esos mares con los que siempre había soñado al lado del gran amor de su vida.
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