Te quiero despacio,
como un caracol que avanza
sin límite de tiempo ni espacio,
te quiero con amor sincero
ese que nace del alma como
si fuera obra de un hechicero,
te quiero porque me nace
como árbol de mango que crece
simplemente porque le place
y de tanto quererte
me doy cuenta que he dedicado
mi vida solo a perderte,
porque este amor lento, mágico y sincero
solo se merece un amor verdadero.