Muchos de ustedes ya habrán visto esta película, pero para los que no lo han hecho, les digo que se trata de lo nuevo de Netflix y me refiero a nuevo en serio porque está disponible desde hace pocos días, menos de una semana.
Protagonizada por Robert Pattinson y Tom Holland, The Devil all the time, inicia con la historia de Willard Russell (Bill Skarsgård), un hombre desesperado por salvar a su mujer que convierte sus oraciones en un sacrificio. Las acciones de Russel llevan a su hijo Arvin (Holland) a pasar de ser un niño que sufre abusos en el instituto a convertirse en un hombre un poco más rudo y violento que sabe cuándo y cómo ha de pasar a la acción. Los acontecimientos se dan lugar en un pequeño pueblo en Ohio y en otro al oeste de Virginia en los EEUU desde los años finales de la segunda guerra mundial hasta mediadios de los años sesenta, abarcando unos veinte años y aunque en el póster y en los créditos están mencionados los protagonistas, creo que el personaje principal de la historia no es ninguno de ellos, sino uno un poco menos aprehensible.
A lo largo de la cinta, podemos ver a varios personajes corruptos que, en nombre de Dios o de la ley, cometen abusos de todo tipo hacia sus semejantes. Un policía que extorsiona y tiene tratos con mafiosos, una pareja que se detiene a ofrecer ayuda a los autoestopistas con una segunda intención, retorcida y mortal, una pareja de hermanos predicadores, enfermos, extasiados, de los cuales uno está seguro de oír la voz del Señor; y un clérigo arrogante y manipulador que utiliza palabras dulces y revestidas de su autoridad espiritual para conseguir favores sexuales de las jóvenes de su feligresía.
La película puede resultar un poco incómoda para algunos por la historia, porque lo que parece querer contarnos es que no sólo el demonio está por ahí todo el tiempo sino que también está en todas partes y en todas las personas. Los pocos personajes buenos que hay en la cinta, acaban como víctimas de los demás o cometiendo actos de violencia y maldad en contra de los que asumimos como malvados y aunque esto último tiene cierto regusto de venganza y justicia, en el fondo mueve una parte negativa de los personajes y los espectadores.
Si bien no soy fanático de las producciones de Netflix, tenía interés en ver esta película por el reparto. A pesar de que Tom Holland es muy joven y aún no tiene una vasta filmografía, me llamaba la atención verlo en un papel más adulto, fuera del traje de nuestro amable vecino; por otra parte, Robert Pattinson se ganó mis respetos con la actuación que hizo en The Lighthouse junto a Willem Dafoe (quiero verlo como Batman), así que esta era una oportunidad para ver a ambos actores en papeles diferentes a los acostumbrados. En mi opinión, Holland lo hace muy bien, pero no resulta del todo convincente, creo que por la inconsistencia en su acento americano y porque aún cuando hala el gatillo en varias oportunidades, no logré desasociarlo del todo de su encanto natural; sin embargo, lo de Pattinson sí es muy bueno, resulta alguien completamente diferente a otros papeles que ha hecho y logra transmitir la arrogancia y el abuso de su personaje. Aplausos para Edward Cullen.
Ahora bien, además de Robert y Tom, la película incluye a Bill Skarsgård (el payaso Pennywise en It), la conocida Mia Wasikowska, el soldado de invierno Sebastian Stan, Haley Bennett, Jason Clark, Eliza Scanlen (Beth en Mujercitas) y a Harry Melling, el despreciable primo de Harry Potter, Dudley Dursley. Son rostros familiares, aunque no necesariamente célebres que logran actuaciones aceptables y creo que a pesar de que los nombres más grandes (y los personajes principales ) son el de Skarsgård, el de Pattinson y por supuesto el de Holland, ninguno de ellos toma las riendas de la historia, como si se alternasen la pantalla por ratos sin lograr imponerse sobre el verdadero protagonista, una entidad menos tangible: el mal.
Basada en la novela homónima de Donald Roy Pollock, The Devil all the time gira alrededor de la naturaleza corrupta, violenta y malvada de los seres humanos, como si fuese imposible mantenerse bueno estando rodeado de tanta maldad. La voz en off que narra partes de la cinta y que supongo está también en el libro, me parece un poco excesiva en la información que da y en la cantidad de veces que interviene, por lo que creo que debió adaptarse esa parte de otra forma. Como ejemplo de una buena adaptación de una historia también violenta, puedo citar Animales nocturnos, dirigida por Tom Ford y protagonizada por Jake Gyllenhaal, quien por cierto es productor de esta reciente película de Netflix. En conjunto, no le daría a esta cinta más de un 6,5/10 pero si no les incomodan las historias de crueldad y violencia, vale la pena verla, sobre todo por las interpretaciones que hacen acá los actores principales, lejos de sus trajes de super héroes.
Reseñado por @cristiancaicedo
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