¡Hola amigos y amigas de Hive …buena vibra y mucha salud para el año que se inicia, 2021¡
Siguiendo con las celebraciones decembrinas, en la serie del Ciclo de Navidad, la cual se suma también, en el mes de enero la tradición de la “La Paradura, robo y búsqueda del Niño Jesús”, muy relacionada con la construcción del pesebre o nacimiento.
El pesebre es el motivo principal y símbolo de la Navidad. Su origen se remonta en 1.223, cuando San Francisco de Asís, en las montañas de Umbría, Italia realiza por primera vez el nacimiento con personas y animales reales para rendirle devoción al niño Dios.
En nuestro país, su elaboración se extiende a lo largo del territorio, pero tiene particular relevancia en los Andes venezolanos, el cual adquiere características especiales, no solo por sus monumentales nacimientos que abarcan casi la mitad de la sala en estos hogares andinos, sino que hay una bella celebración dedicada al niño Jesús en promesa, denominada “Paradura del Niño” la cual no se puede realizar, si no hay un pesebre en casa. Esta fiesta se celebra desde el 25 de diciembre hasta el 2 de febrero día de la Candelaria, pudiendo extender hasta finales de mes, en los estado Mérida, Trujillo y Táchira; y en el pie de monte andino en los estados Barinas, Portuguesa y Lara.
Aquí en el estado Lara, quiero comentarles sobre una linda experiencia en el pueblo de Sanare, Municipio Andrés Eloy Blanco, que desde mediados del mes de enero celebran “La Paradura del niño”, esta tradición devocional realizada por promesa, rememora el nacimiento del Niño Jesús, principalmente en los sectores: El Morterito, El Cerrito, La Otra Banda, Yacambú, Loma de Curigua entre otros. Esta costumbre hogareña, se inicia con los preparativos, motivando a los promesantes y dueños de casa a que mantenga los pesebres hasta principio de febrero; donde se planifica el recorrido y las visitas en procesión a las familias que pagan promesas.
Esta experiencia recogida en el año 2010, con el apoyo de la promotora Sra. Mirian Brito, narra la promesa de la Sra. Sacramento Pérez y la familia Rodríguez, donde describen el desarrollo de la ceremonia:
“Es una tradición traída de los Andes merideños, se comenzó a realizar en 1989, se hace en honor al Niño Jesús, donde el pesebre permanece alumbrado con velas durante el período de la ceremonia. Se escogen los padrinos, estos colocan al niño en un paño blanco y salen en procesión. Esta tradición se celebra los primeros días del mes de enero comienzan los preparativos en los sectores El Morterito y El Cerrito, motivando a los dueños de casa a mantener los pesebres y el área de recorrido. Los padrinos obsequian al niño su vestimenta así como el alumbrado para la procesión, extienden las invitaciones a familiares, amigos y autoridades de la localidad. El día central de la celebración, por lo general es el tercer sábado de enero, el niño es llevado a las 12:00 m. del día a la capitana en el sector El Morterito, donde se deja en el altar alumbrado con velas; a las 5:00 pm se inicia la fiesta religiosa con el rezo del rosario y cantos de villancicos, acompañado de los instrumentos: el cuatro, el violín, la tambora y la charrasca. Los padrinos reparten las velas encendidas y toman al niño del altar sobre un lienzo y se inicia el recorrido por la zona ya establecida. En la procesión van los niños con velas encendidas, luego la imagen del niño Jesús con sus padrinos, los músicos, cantores y posteriormente los invitados y asistente; detonan fuegos artificiales en el lugar. Van recorriendo y entrando a las casas, visitando los pesebres; los dueños de casa obsequian a los visitantes café, chocolate, chicha, caramelos. Se cumple con el recorrido establecido y se llega a la última casa donde se realiza el otro acto de fe, con cánticos de adoración se piden deseos, se canta la salve, se realizan tonos al niño y por último se hace el brindis con vino y bizcochuelo para dar gracias a los acompañante y se despiden. La Organización está compuesta por: Un Capitana Mayor (Sacramento Pérez, Capitán Menor (Rafael Piñero), Organizadores (María Elena Angulo, Belkis Escalona y Violeta Rangel)”
Espero que les haya gustado mi post y lo hayan disfrutado, nos vemos en la próxima publicación, gracias por su apoyo.
Por Margarita Morales. Fotografías Margarita Morales, redes sociales el impulso. Archivo documental FUNDACEC. Lara, Enero 2021